Yasmina Rossi no es una modelo convencional. Comenzó en este mundo casi a los 30, cuando muchas modelos están cerca del retiro, y no logró su primer gran contrato hasta que fue contratada para una campaña de ropa de Marks & Spencer.

"Estoy mejor que cuando tenía 20 años y me siento más feliz", comentaba esta semana a The Sunday Times. Sus dos nietos pueden presumir de abuela, y es que con 59 años, Rossi sigue en plena forma y luciendo una figura envidiable, como se puede comprobar en su perfil de Instagram, donde sus posados en bikini no tienen nada que envidiar con los habituales de sus colegas mucho más jóvenes.

Su secreto de belleza es simple. "Me exfolio la piel una vez por semana con un preparado de aceite de oliva y azúcar, como un aguacate diario y sigo una dieta rica en pescado y carne. No hago excesivo ejercicio físico y trato de evitar en la medida de lo posible los medicamentos", comentaba a la citada publicación.

Con 45 años empezó a hacerse un nombre en la moda cuando se trasladó de su Francia natal a Estados Unidos, donde consiguió captar la atención de importantes firmas en Nueva York. Y no fue hasta 2012 cuando alcanzó la fama internacional gracias a la campaña de Navidad que realizó para Marks & Spencer.