Convocada por la Plataforma por la Insostenibilidad de la M-30, que agrupa a una treintena de asociaciones vecinales, ecológicas y partidos políticos, la protesta comenzó a las 19.30 horas con la participación de algunos dirigentes municipales de la oposición, como la portavoz de IU, Inés Sabanés, y el portavoz adjunto del PSOE, Oscar Iglesias.

Situados detrás de la pancarta principal, en la que se podía leer "Madrid contra la ampliación de la M-30", también se colocó asimismo el conocido como topo de Gallardón, una persona disfrazada de este roedor que "acompaña" algunas veces al alcalde en sus "aventuras tuneladoras".

Los convocantes aseguraron que se oponen al proyecto porque lo consideran "contaminante y muy caro", decía Inés Sabanés, que costará a los madrileños 18.000 millones de euros en 35 años. Además, las obras pondrán en circulación "250.000 tubos de escape más", decía un portavoz de Ecologistas en Acción.

Coreando gritos de "Gallardón el túnel a tu salón" o "Gallardón de cabeza al socavón", los manifestantes llegaron sobre las 20.15 a la plaza de la Villa, donde se ubica el Ayuntamiento.

Allí se leyó un manifiesto en el que se reprochaba al alcalde que, en lugar de paliar las "graves deficiencias en equipamientos, carestía de la vivienda o las tremendas carencias en zonas verdes y un largo etcétera", destine "todos sus recursos, y la de futuros consistorios, a ampliar la M-30".