El riesgo a un posible atentado de ETA tras la ruptura de la tregua el pasado 5 de junio ha ayudado a aumentar la inquietud en las Fuerzas de Seguridad ante un inminente ataque por parte de la banda terrorista.

Las Direcciones conjuntas de la Guardia Civil y la Policía difundieron este viernes una circular interna para que todos los agentes extremen las medidas de seguridad personales y de los edificios, recordando que el nivel de riesgo es elevado.

A media tarde de ayer, la circular ya había llegado a las comandancias y a algunas compañías del Instituto Armado, así como a las jefaturas del Cuerpo Nacional de Policía y distribuida por los puestos de la Benemérita y comisarías de Policía.

Víctimas

Las sospechas han crecido tras el hallazgo de un vehículo abandonado el pasado 21 de junio con 115 kilos de explosivos en una carretera de Ayamonte (Huelva). Entre el material encontrado había 10 detonadores y 8 temporizadores, claros indicadores de que la banda estuviera preparando una campaña de atentados en el sur de España.

Los Servicios de Información descartan todavía pronunciarse sobre el modus operandi en el que la banda regresará a la violencia, ya sea a través un atentado, previo aviso, de grandes dimensiones o asesinando a una persona, probablemente un miembro de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

A finales de marzo, la Guardia Civil desarticuló el 'comando Donosti', provisto de armas y explosivos y de información sobre 400 posibles objetivos, a la espera de recibir una orden directa de la dirección de ETA para atentar.