La campaña 'Trueque. Material escolar por sanciones', organizada por la Biblioteca para jóvenes Cubit y que se prolongará hasta el 30 de septiembre, está dirigida a apoyar a familias con pocos recursos con niños en edad escolar, canjeando sanciones por material educativo.

Durante estos días de agosto y septiembre la Biblioteca para Jóvenes Cubit ofrece a sus socios la posibilidad de canjear las sanciones generadas por un retraso en las devoluciones de materiales prestados por donaciones de material escolar, que será destinado a familias con poco recursos que cuentan entre sus miembros con jóvenes escolarizados, a partir de 12 años.

Se trata de la segunda campaña de recogida de material escolar que pone en marcha la biblioteca en colaboración con AMPAS y equipos directivos de los centros educativos de la zona. Los destinatarios de los materiales son jóvenes a partir de 12 años por lo que se pide que los materiales entregados no estén dirigidos a público infantil.

Además, los materiales donados deben ser nuevos. Se admitirán materiales de segunda mano de determinados productos, siempre que estén en buen estado: reglas, estuches, compases, mochilas, diccionarios. Y en ningún caso se admitirán libros de texto.

El procedimiento habitual tras el retraso en la devolución de los materiales consiste en que los usuarios sean sancionados, es decir, que no puedan utilizar el servicio de préstamo durante un periodo equivalente al número de días retrasados.

De esta forma, si un usuario se ha retrasado diez días en la devolución de los materiales prestados, estará sancionado por un plazo de diez días, y no podrá llevarse a casa ningún material hasta que haya finalizado el plazo de penalización.

Sin embargo, con esta iniciativa se pretende sustituir estas penalizaciones por donaciones de material escolar. Para ello, la biblioteca ha establecido una tabla de correspondencias, dependiendo del grado de sanción: por ejemplo, para penalizaciones de hasta 15 días, basta con donar bolígrafos o lápices y para más de 15 días, cuadernos.

La campaña está abierta a toda la ciudadanía, pero con un guiño especial a los socios de la biblioteca más "tardones", a los que se les recuerda que el material de la biblioteca es para uso y disfrute de todos los usuarios, por lo que el retraso o la no devolución supone un perjuicio de tiempo y dinero para el resto.

Para sanciones de más de 2 meses, la Dirección de la biblioteca estudiará el caso de forma particular. En todo caso, la donación de material escolar no supondrá la sustitución de la obligación de devolver un material prestado, es decir, los socios deberán devolver el material prestado para beneficiarse, posteriormente, de la eliminación de su sanción.