El Sistema Integrado de Gestión de Aceites Usados (SIGAUS) recuperó y recicló en 2014 en Aragón 4.316 toneladas de aceite industrial usado, recogido en 2.118 establecimientos productores de la Comunidad, repartidos en 288 municipios, en los que se dio cobertura de servicio al 94 por ciento de la población aragonesa, llevándose a cabo más de 5.300 operaciones de recogida.

La cantidad de aceite usado recuperada es, al menos, similar a la estimación de la cantidad generada, teniendo en cuenta que el aceite industrial, durante su uso, pierde algo más de la mitad de su volumen, han informado en una nota de prensa desde el SIGAUS.

Asimismo, han indicado que las empresas fabricantes adheridas a él —que representan un 90 por ciento del mercado total— han comercializado en Aragón en 2014 un total de 8.195 toneladas de aceite industrial, lo que representa casi el tres por ciento del total de este producto puesto en el mercado nacional durante el pasado año.

Estos aceites industriales se utilizan tanto en vehículos, como en procesos y maquinaria industrial y generan anualmente más de 4.300 toneladas de aceites usados en Aragón, "un residuo peligroso y con un alto potencial contaminante de cuya gestión se encarga SIGAUS".

Lugar de producción

En términos de generación, el 58 por ciento del residuo se produjo en grandes focos, es decir, en términos municipales que generan más de 100 toneladas al año, y que suponen tan sólo diez municipios.

En cambio, un 36 por ciento del aceite usado provino de forma muy dispersa de pequeños núcleos rurales, localidades con menos de 30.000 habitantes y menos de 100 habitantes por kilómetro cuadrado, en total 268 municipios, que representan el 93 por ciento de los municipios totales atendidos, y en los que se ubican el 46 por ciento de los establecimientos a los que SIGAUS dio servicio en Aragón.

De ellos, el sistema de recogida articulado por SIGAUS llegó a 258 municipios rurales de pequeño tamaño —menos de 5.000 habitantes—, en los que se recogieron 1.470 toneladas.

"Aunque es una cantidad minoritaria en el contexto de todo Aragón, supone un volumen significativo de residuo si se tiene en cuenta que se trata de una cantidad casi similar al residuo que se recogió, por ejemplo, en toda la ciudad de Zaragoza, y que además cuenta con un elevado potencial contaminante", han apuntado las mismas fuentes.

Otro ejemplo de la dispersión en la generación del aceite usado es que se realizaron recogidas en 73 municipios considerados por la Unión Europea como 'zona desfavorecida' por sus condiciones de montaña, donde se atendió a 194 puntos productores de este residuo.

Tipo de productor

Los datos registrados por el sistema de información tecnológico de SIGAUS (SIT) indican que el 45,3 por ciento de los establecimientos en los que se prestó servicio fueron talleres mecánicos —un total de 960—, siendo además la actividad de mayor generación de aceite usado en esta Comunidad, el 34,4 por ciento del total recogido.

El resto de las recogidas tuvieron lugar en otro tipo de actividades que, sin embargo, sumaron más de 1.150 puntos productores de muy diversa índole, como industria, agricultura, comercio, hostelería, transporte y construcción.

Beneficios ambientales

De la cantidad total recuperada en Aragón, el 23,3 por ciento —algo más de mil toneladas— fue destinado a procesos de regeneración mediante un tratamiento que consiste en un refino del aceite usado para eliminar agua, sedimentos, metales pesados y otros compuestos químicos.

Gracias a él, se obtienen nuevas bases lubricantes que se aplican en la fabricación de nuevos aceites industriales, retornando el residuo al inicio de su ciclo de vida, "y convirtiéndose en un perfecto ejemplo de economía circular", han apuntado desde el SIGAUS.

Este proceso sustituye a la fabricación de lubricantes mediante el refino del petróleo, generando, además, menos CO2 y utilizando menos energía que éste.

Así, con la cantidad de aceite usado recogido en Aragón que SIGAUS regeneró se obtuvieron casi 670 toneladas de nuevos lubricantes, suficientes como para realizar el cambio de aceite a más de 165.000 turismos.

Otra de las vías de tratamiento del residuo es la valorización energética, proceso con el que se fabrica combustible de uso industrial, y que es utilizado en grandes hornos de cementeras, papeleras, materiales de construcción o en centrales térmicas de cogeneración eléctrica.

Concretamente, las más de 3.300 toneladas de aceites usados destinadas a la valorización energética a través de SIGAUS durante el pasado año han permitido la generación de una energía equivalente a 36 GWh, que es el consumo anual de casi 8.400 hogares españoles de tipo medio.

Estos beneficios ambientales son posibles gracias a la financiación de las actuaciones de la industria gestora que lleva a cabo SIGAUS, desde la fase de recogida al tratamiento final. SIGAUS es una entidad sin ánimo de lucro, que dedica a la gestión del aceite usado el cien por cien de sus ingresos, procedentes a su vez de una aportación que realizan sus fabricantes asociados, y que se repercute en el precio de los lubricantes puestos en el mercado, de acuerdo con la ley.