Desde el pasado viernes, día 15 de junio, se encuentran en servicio nueve puestos de vigilancia para garantizar la seguridad de los bañistas en las playas del municipio de Cartagena. El pasado 1 de junio se puso en marcha el primero de estos puestos en la playa del Barco Perdido junto al Hotel Galúa de La Manga. Los restantes hasta completar 19 empezarán a funcionar el 1 de julio.

Como años anteriores se puede conocer el estado de las playas a través de internet, en la página web del ayuntamiento www.cartagena.es , y el teléfono móvil, mandando el mensaje PLAYAS al 609030160. En este operativo del Plan COPLA 2007, participan unos 120 voluntarios de Protección Civil que velarán por la seguridad de los bañistas durante el verano, para lo que contarán con el apoyo de cuatro motos náuticas, cuatro zodiacs y dos quads, tres vehículos todo terreno y cinco furgonetas. Los voluntarios de Protección Civil practicaron el año pasado más de siete mil quinientas asistencias, entre las que predominaron las curas de picaduras de medusas y de pequeños cortes.

Asimismo, protagonizaron más de 226 rescates de personas con riesgo de ahogarse, a los que hay que sumar 58 de personas en embarcaciones que iban a la deriva. Estas intervenciones suponen el 70 por ciento de todas las realizadas en la costa de la Región de Murcia durante el pasado verano.

Los 19 puestos de vigilancia

Desde el 1 de junio y hasta el 31 de septiembre se encuentra operativo el situado en la playa del Barco Perdido (Galúa) en La Manga. Entre el 15 de junio y el 15 de septiembre, estarán en servicio los situados en Cala del Pino, Las Sirenas, Amoladeras (Entremares), Levante (Cabo de Palos), Los Nietos, Mar de Cristal, Calblanque, Cala Cortina y San Ginés (La Azohía). Durante los meses de julio y agosto, estarán operativos Calnegre (Monteblanco), Cala Reona, Playa Paraíso (Playa Honda), Villas Caravaning, Islas Menores, Los Urrutias, La Chapineta (La Azohía), Isla Plana y El Portús.

Ordenanza de playas como novedad

Como novedad este verano, los voluntarios de Protección Civil contarán para desarrollar su labor con la ordenanza que regula el uso de las playas, aprobado recientemente por el Ayuntamiento. Como se recordará se trata de una serie de normas de convivencia y seguridad que deben adoptar los ciudadanos cuando disfruten de estos espacios públicos.

Así se establecen una serie de conductas que los bañistas deben observar en todo fomento y faculta a los agentes de la Policía Local para sancionar su incumplimiento. Uno de los aspectos fundamentales es el de la seguridad de los bañistas. Así se establece la obligación de obedecer las indicaciones del personal de protección civil, ya que su incumplimiento no sólo pone en peligro la vida del bañista, sino también la de los propios socorristas.

En cuanto a normas de convivencia, la ordenanza limita la realización de actividades, juegos o ejercicios que puedan molestar al resto de usuarios en las zonas y aguas de baño, tanto en la arena como en el mar. También se prohíbe la utilización en la playa de aparatos o instrumentos musicales o cualquier otro artefacto que emitan ruidos y produzcan molestias a los demás usuarios. En las zonas de baño también se prohíbe la navegación deportiva y la pesca diurna.

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