El Tren Azul realizará este sábado, 18 de julio, el trayecto Zaragoza-Canfranc y regreso, con todas las plazas vendidas desde hace meses, con motivo de los actos de recreación de la inauguración de la Estación Internacional de Canfranc.

En esta ocasión circulará con el nombre de 'Expreso Canfranc 1928' y ha sido fletado por el Ayuntamiento de Canfranc para formar parte de los actos de recreación organizados en torno a la estación, encargándose a su vez de llevar turistas a la localidad oscense para asistir al acto.

El pasajero más esperado será su majestad Alfonso XIII, que también llegará a la estación internacional a bordo de este tren histórico, tal como lo hiciera el auténtico rey hace 87 años, ha explicado la Asociación Zaragozana de Amigos del Ferrocarril y Tranvías (AZAFT) en una nota de prensa.

El Tren Azul es una composición ferroviaria formada por antiguos coches de viajeros y furgones postales que rememora los grandes expresos que circularon por Europa durante mediados del siglo XX. Es mantenido y explotado por AZAFT, una asociación sin ánimo de lucro que trabaja desde hace 30 años en Aragón por la preservación de la historia del ferrocarril.

La asociación ha puesto en servicio este tren gracias al trabajo voluntario de sus socios, quienes acompañarán al convoy en todo momento asegurando del buen funcionamiento de los vehículos y una atención personalizada a los viajeros.

Correos también participa en este evento editando un matasellos especial para este viaje histórico. Durante el trayecto, los carteros sellarán correspondencia sobre la marcha en los coches estafeta y furgones postales pertenecientes al Museo Postal que la asociación custodia.

Con ello, y solo durante este trayecto, se recuperará el oficio perdido de los antiguos ambulantes postales, aquellos operarios que clasificaban sobre la marcha la correspondencia que era transportada en el ferrocarril.

Historia del canfranero

Asimismo, durante el trayecto los viajeros podrán disfrutar de una pequeña exposición fotográfica sobre la historia de la construcción del canfranero, del pase de documentales sobre el Canfranc y del museo de los ambulantes postales.

También se podrá admirar la reproducción a escala de la locomotora de vapor Baldwin I, de 1920, sobre la que la Asociación tiene un proyecto de restauración para el que se ha organizado una campaña de mecenazgo.

La AZAFT confía en que el éxito de esta iniciativa sirva para demostrar el potencial turístico que posee este trayecto ferroviario, así como la estación de Canfranc, "potencial que podría servir en el futuro para consolidar la circulación del tren histórico en la oferta turística de las poblaciones por las que discurre esta espectacular línea".