El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, ha reconocido este jueves que la Plaza Mayor de la capital "ganaría mucho" si se peatonalizara al cien por cien; es decir, si se eliminaran los accesos al aparcamiento y se suprimiera el acceso para autobuses urbanos y taxis que conecta las calles Ferrari y Pasión, por lo que se ha comprometido a hacerlo "siempre que se pueda y sea viable".

En declaraciones recogidas por Europa Press, el regidor ha asegurado que el Consistorio está "estudiando fórmulas al respecto", por lo que "no hay nada descartado en este momento".

Asimismo, Puente ha advertido de que antes de adoptar cualquier decisión mantendrá conversaciones con la empresa concesionaria del aparcamiento, al que se accede por la propia plaza a través de un itinerario marcado desde la calle Manzana y del que se sale por otro similar a través de la calle Jesús, con la vista puesta al establecimiento de nuevos accesos que eviten el paso de vehículos por el ágora vallisoletana.

En cuanto a los posibles costes de esta obra, el alcalde ha subrayado que los términos "caro o barato" son "relativos", tras lo que ha abierto la puerta a la colaboración y financiación privadas a cambio de determinadas concesiones.

Óscar Puente, que ha participado en la inauguración de la exposición 'Galerie Lelong', ha pedido "paciencia" a la hora de abordar esta cuestión, ya que necesita "una reunión de trabajo para hablar de este tema.

En cualquier caso, ha insistido en que la Plaza Mayor "ganaría mucho" con este cambio, pues sería "un lugar de esparcimiento y disfrute" en el que las familias con niños "no tendrían que preocuparse por el paso de vehículos".

Por último, ha sentenciado que, a pesar de que esta actuación supondría "un cambio en la estructura del tráfico de la ciudad", con el tiempo los ciudadanos "se acostumbrarían como ha ocurrido otras veces", por lo que ha primado los beneficios que tendría.