Cerca de la mitad de los autónomos de Castilla y León (44,6 por ciento) cree que el nuevo panorama político surgido de las elecciones municipales y autonómicas del pasado 24 de mayo dañará la recuperación económica mientras que un 26,4 por ciento considera que el proceso es "imparable" por lo que los cambios en las administraciones no tendrán efectos en esa recuperación.

Estas son las principales conclusiones del barómetro realizado por la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos ATA para analizar la evolución del primer semestre de 2015 —en Castilla y León han participado 1.062 trabajadores por cuenta propia— según el cual el 16,9 por ciento de los consultados cree que el nuevo panorama político consolidará la recuperación.

Además, ATA se ha interesado por la opinión de los trabajadores autónomos en materia de impuestos donde la mayoría de los consultados (55,8 por ciento) apuesta "con mayor fervor" por una rebaja del IVA, "imprescindible" a juicio de Soraya Mayo, mientras que el 41,2 por ciento aboga por una "reducción sustancial" de las cotizaciones sociales y un 25,3 por ciento prefiere la bajada del IRPF —una opción que se eligió antes del reciente anuncio de rebaja de este impuesto—.

Finalmente, los autónomos de Castilla y León se dividen entre los que quieren cotizar a la Seguridad Social de acuerdo con el 30 por ciento de su rendimiento neto, con un 43,5 por ciento de los apoyos, y los que quieren continuar con el actual sistema de cuotas, con un 39,8 por ciento de las respuestas, mientras que un 16,7 por ciento de los consultados no sabe qué opción tomar.

Además, dos de cada tres autónomos de Castilla y León (66,1 por ciento) estaría dispuesto a cotizar en concepto de formación como asalariado para acceder así a una formación bonificada y continua además de "adecuada y de calidad", según ha apuntado Mayo, quien ha considerado que cotizar por formación no representa una cantidad desorbitada para los autónomos.

Por otro lado, siete de cada diez autónomos en Castilla y León (71,2 por ciento) cree que la situación de la economía está mejorando y que continuará así a lo largo de 2015, un dato mejor que el del anterior barómetro que situó ese optimismo en el 65,7 por ciento de los consultados. No obstante, un 29,4 por ciento cree que 2015 está siendo un año "complicado" y que la situación de su negocio es negativa, también por debajo que hace seis meses.

Uno de cada tres ha vendido más

Además, uno de cada tres autónomos asegura que ha vendido más en lo que va de año mientras que el 29,4 por ciento que asegura que su facturación ha evolucionado de forma negativa apelan como principal causa a la caída de ventas por pérdida de actividad, seguida de la morosidad y a la imposibilidad de acceder al crédito.

Respecto a las expectativas laborales, sube en dos puntos el porcentaje de trabajadores autónomos que tienen empleados a su cargo (55,1 por ciento) y entre estos más de la mitad asegura que no tendrá que prescindir de ningún trabajador en 2015, "aunque también es cierto que muchos todavía no se atreven a dar el paso", ha precisado Mayo.

Este barómetro concluye que tres de cada diez autónomos ha creado empleo en los seis primeros meses de 2015 o prevé hacer en los siguientes, lo que hace ver la situación "con un poco más de esperanza" a lo que Soraya Mayo ha sumado que se confirma que los trabajadores por cuenta propia son "la llave de la recuperación" por su capacidad para generar empleo y riqueza en Castilla y León.

En cuanto al 63,1 por ciento que no prevé realizar nuevos contratos, más de la mitad apela a la caída de la actividad, el 34,6 por ciento asegura que está pasando por dificultades económicas que le impiden cualquier gasto extra y el 4,8 por ciento realiza en estos momentos reducciones de plantilla.

Finalmente, Soraya Mayo ha significado también el cambio de tendencia en el acceso a la financiación a pesar de que el temor a endeudarse continúa "haciendo mella" entre los trabajadores por cuenta propia ya que sólo tres de cada diez autónomos ha acudido a una entidad para buscar una financiación que se está dando "pero muy muy a cuenta gotas".

En concreto, dos de cada tres autónomos solicita un crédito inferior a 30.000 euros y el 47,3 por ciento menos de 18.000 euros, unas cantidades "paupérrimas", según Soraya Mayo, quien ha lamentado que "con todo y con eso haya dificultades". El 58,2 por ciento obtuvo respuesta positiva por parte de la entidad financiera con un 30,8 por ciento de denegaciones.

En el caso de las líneas de financiación que pone a disposición el Instituto de Crédito Oficial (ICO), sólo el 31,9 por ciento de los trabajadores autónomos ha solicitado una ayuda de este tipo en los últimos cinco años.

Soraya Mayo ha situado entre los datos más negativos de este barómetro el incremento de la morosidad, que afecta al 53,7 por ciento de los encuestados —51,2 por ciento en la anterior consulta—, y del tiempo de demora con un 44,1 por ciento que cobra sus facturas en un plazo de entre 60 y 90 días, un 22,5 por ciento entre los 91 y los 180, un 7,7 por ciento entre 181 y 240 días, un 6,2 por ciento entre 241 y 360 días y un 8,1 por ciento más de 361 días.