La Fiscalía del caso de triple asesinato de Burgos explicó ayer que solicitó la detención del joven de 19 años debido a que la Policía tenía indicios de la «autoría de un menor de edad en los hechos investigados» y necesitaban registrar su casa «para encontrar objetos que serían la prueba concluyente de su participación». Las comprobaciones que debían realizarse podrían durar más de las 48 horas de plazo de detención que marca la ley, por eso se solicitó su ingresó preventivo. Sin embargo, tras el registro, no se encontró lo que se buscaba y todos los indicios desaparecieron, con lo que ya no se justificaba su ingreso cautelar. Las investigaciones y comprobaciones continúan y el menor sigue «incurso en la causa», mientras que el abogado de la familia afirma que se encuentran en una situación de susto y sorpresa que les ha originado un importante desgaste.