El Gobierno de Melilla ha mostrado inquietud por la aparición de cuatro perros con rabia en los últimos treinta días, después de casi un año de no darse ningún caso, animales que, según la Consejería de Bienestar Social y Sanidad, llegan desde Marruecos.

En declaraciones a los periodistas, la titular de esta Consejería, María Antonia Garbín (PP), ha admitido que sienten "mucha preocupación" al reconocer que desde junio de 2014 no se había detectado ningún perro con rabia mientras que en el último mes ya llevan contabilizados cuatro con esta enfermedad contagiosa y que puede llegar a ser muy peligrosa.

Por ello, María Antonia Garbín ha pedido a los ciudadanos "no acercarse a animales que parezcan enfermos o abandonados" y de inmediato comuniquen el hecho a la Policía Local.

La titular en funciones de Bienestar Social y Sanidad también ha solicitado que "no se recojan estos animales" y ha recordado que existen otras fórmulas "si alguien quiere adoptar un perro o cualquier animal doméstico".

Al mismo tiempo ha anunciado un refuerzo en los laceros de la Policía Local y la contratación de una empresa privada que colabora en estas funciones, para evitar la presencia en Melilla de perros callejeros o abandonados.

La consejera ha señalado que mientras en la Península Ibérica la rabia se considera erradicada desde hace muchos años, en Melilla "es endémica por su cercanía a Marruecos".