Manuel Murciano Vicente, del Partido Aragonés (PAR), ha comenzado este sábado su décima legislatura al frente de la localidad turolense de Moscardón, de 60 habitantes, "un pueblo pequeño pero que funciona". Con 73 años, gobierna ininterrumpidamente desde 1979 y "si los vecinos me apoyan" continuará haciéndolo, no ha fijado una fecha para su jubilación política.

Este municipio de la Comarca de Sierra de Albarracín tiene una docena de niños y el 70 por ciento de los vecinos no supera los 40 años de edad. Cuenta con un restaurante, un hotel, un hostal y un bar.

Murciano ha terminado de reparar el alumbrado público durante la legislatura pasada y ahora tiene pendiente realizar obras para mejorar el suministro de agua, habilitar varios senderos y levantar una sala multiusos. "Lo que ocurre es que los recursos son los que hay y dependemos de los demás", el Ejecutivo autonómico, la Diputación Provincial y el Consejo Comarcal.

La Comarca apoya a esta localidad especialmente en materia de servicios sociales, pero las inversiones son "pocas" y la Diputación también ayuda al municipio con algunas obras.

Murciano gobierna Moscardón con el régimen de Concejo Abierto, por su escaso número de habitantes, por lo que tiene competencias propias para gestionar "el día a día" y somete a la voluntad de la asamblea de vecinos las decisiones más importantes.

A su juicio, Moscardón ha experimentado una notable evolución desde que, en 1979, se hizo cargo de la alcaldía. "Cuando comenzamos no había agua ni luz, como en la mayoría de los pueblos, las calles eran de tierra y toda la gente era mayor, esto estaba casi despoblado".

Pasado el tiempo, Moscardón "ha evolucionado como todos los pueblos", es una localidad con futuro que tiene, ha insistido, "mucha gente joven y muchos niños".