El PSOE de Ourense ha hecho un llamamiento a la unidad y a la "pacificación global" en la asamblea local que reunió esta noche a 200 militantes de la ciudad, a pesar de que abundaron los reproches por la "poca autocrítica" y "falta de reflexión" tras los resultados electorales del 24 de mayo.

El primero en intervenir fue el candidato socialista a la alcaldía de la ciudad, José Ángel Vázquez Barquero, que repitió ante los militantes los argumentos esgrimidos ante la prensa en las tres comparecencias que tuvo desde el domingo electoral y se refirió a un hipotético pacto de gobernabilidad local para asegurar que "ni con el PP ni con Democracia Ourensana". "Son lo mismo", afirmó.

Por su parte, la secretaria general de la agrupación local y número dos de la candidatura, Carmen Rodríguez Dacosta, expresó el llamamiento a la unidad tras criticar al secretario provincial, Raúl Fernández, por "pedir cabezas y dimisiones", afirmación que fue respondida por la secretaria de Organización de la ejecutiva provincial y militante en Ourense, María Quintas.

"En Ourense ciudad perder 10.000 votos es un descalabro y una barbaridad y hay que analizarlo, pero Raúl (Fernández) en ningún momento pidió la dimisión de nadie, y así está grabado, esas voces venían de más cerca", replicó.

También tachó de "lamentable" y "poco serio" el análisis expresado por miembros de la candidatura local, que atribuyeron a Pachi Vázquez -contrincante de Barquero en las primarias socialistas- y a los díscolos locales -5 ediles del grupo de Gobierno- la capacidad de "chimpar más de 10.000 votos en la ciudad".

María Quintas calificó esos argumentos de "infantiles" y a su vez, apeló a la unidad. "Separados nos vamos a la mierda", alertó.

Candidatura maravillosa

En las 14 intervenciones anotadas por el moderador de la asamblea se sucedieron halagos a Barquero por aceptar ser candidato y conseguir una lista "maravillosa" con presencia de todos los sectores del partido. Se asumió que los ciudadanos, con sus resultados en votos, penalizaron al PSOE porque se equivocó y algunas voces llamaron al "cambio, pero con tiempo y pausadamente".

Entre los argumentos para explicar los resultados, se sucedieron reproches que se remontaron a la época del exalcalde Francisco Rodríguez, y a partir de ahí "conflictos con los funcionarios", "incumplimiento de resoluciones jurídicas", la contratación de la hija del alcalde en funciones, Agustín Fernández, o la polémica en torno a las aceras de su calle.

También hubo quien reflexionó que la mala gestión provocó los resultados, porque sólo una división interna no lleva a perder 10.000 votos. Dos horas y media de asamblea contaron con aplausos en muchas intervenciones, que se sucedieron sin derecho a réplica, y terminaron con intervenciones finales de Barquero y Carmen Rodríguez.

Los que fueron saliendo antes de que finalizase la asamblea, lamentaron la "falta de reflexión", la "poca autocrítica" y la ausencia de decisión para el cambio que ven necesario.

Análisis sin decisiones

El propio Vázquez Barquero resumió el resultado de la asamblea cuando finalizó y dijo que no era para tomar decisiones, sino para hacer un análisis.

"Los resultados fueron francamente malos y como reacción se decide seguir adelante, más unidos que nunca, y renovando estructuras progresivamente, con la incorporación de gente nueva, pero no se habló de que nadie tenga que irse ni de dimisiones", concluyó.