Dos de cada tres personas que recurrieron el pasado año a los servicios de empleo de Cáritas fueron mujeres.

En 2014, un total de 70.971 personas participaron en el plan que la organización desarrolla para ayudar a aquellos que lo necesitan a conseguir un trabajo, a formarse o a tomar parte en actividades de economía social, entre otras cosas, según consta en el informe Cáritas con el Empleo 2014, que este miércoles ha presentado su secretario general, Sebastián Mora.

La cifra ha caído en los dos últimos años un 13% —81.613 en 2012 y 77.072 en 2013—, algo que Cáritas achaca a tres cosas: en primer lugar, la desesperación, que provoca abandonos en esa búsqueda de empleo; en segundo lugar, muchos inmigrantes han regresado a sus países; y por último, el hecho de que el camino a seguir hasta conseguir un trabajo es cada vez más largo.

No obstante, Cáritas visto crecer la tasa de aquellos que, tras pasar por este recorrido, lo han logrado. En 2014 fueron 13.681 personas las que encontraron trabajo, un 19,2% del total de 70.971 personas atendidas (16% en 2011, 2012 y 2013) y un 13,7% más que el año anterior. Es, dicen, un motivo de "esperanza", ya que aunque en el informe reconoce "síntomas positivos" en la economía, recuerda que la crisis ha dejado "más paro y menos poder adquisitivo", que la situación es "grave" y que el empleo hoy es, sobre todo, temporal.

Así, entre las personas que acudieron el pasado año a Cáritas para reinsertarse laboralmente había personas que antes de la crisis tenían un trabajo estable, pero también otros que arrastraban una situación de inestabilidad. Un 65% fueron mujeres, tres puntos más que en 2013, lo que rompió la tendencia anterior, ya que en los dos años anteriores había subido el porcentaje de hombres.

El 53,2% (37.813) de las personas atendidas por los servicios de empleo de Cáritas eran de origen español, un porcentaje que no ha dejado de subir desde 2010, según el informe, y que desde el año pasado supera al de personas de origen extranjero, que en un 78,6% procedían de países extracomunitarios. La edad media de las personas atendidas crece debido al aumento de personas entre 36 y 45 años (30%) y de los mayores de 45 años (28%) y la caída de los de 25-35 (28%) y 18-24 (13%).

En cuanto al nivel de formación, el 49% de los atendidos tenía estudios básicos y el 28% educación secundaria; solo el 13% había cursado bachiller o FP y el 5% eran graduados universitarios.

En el informe, Cáritas destaca que 61.488 personas han participado en sus servicios de orientación laboral (-7,7%) y 14.771 personas fueron atendidas por servicios de intermediación. Hubo 8.196 personas y empresas, apuntan, que se acercaron a la organización a ofrecer empleo. Asimismo, 19.048 personas recibieron formación (-7,9%) y 481 personas (+93,1%) participaron en acciones de autoempleo.

Cáritas destinó en 2014 40,69 millones de euros para su programa de empleo, un 13,1% más que en 2013 y un 50% más que en 2011. También crece, destacan el número de personas voluntarias (2.619 y +8%) y contratadas (823 y +22,8%) en los programas de empleo, que cuentan con 31 empresas de inserción, 7 cooperativas y 2 centros especiales de empleo.