El PSOE quiere que el Gobierno dé una compensación económica a los pequeños municipios situados a lo largo del Camino de Santiago cuya población es muy baja en relación con el número de peregrinos que reciben, de modo que puedan prestar unos servicios públicos de calidad sin agotar los escasos recursos que obtienen a través de los impuestos a sus vecinos.

Así se recoge en una proposición no de ley que los socialistas han registrado para su debate en la Comisión de Hacienda del Congreso y a la que ha tenido acceso Europa Press. En su texto, el principal partido de la oposición resalta la importancia del Camino de Santiago —sobre todo el Camino Francés— como escaparate de España al mundo, pero también advierte de las consecuencias que esa importante afluencia de visitantes tiene para los municipios de menor tamaño.

Y es que, según sus datos, entre abril y octubre de 2013 unas 75.000 personas transitaron por los 750 kilómetros de ruta entre Roncesvalles y Santiago de Compostela, lo que hace que pueblos pequeños como Vega de Calvarce, en León, tengan que atender unas 600 pernoctaciones diarias a pesar de contar apenas con 700 vecinos empadronados y unos recursos que apenas pasan por la participación de los tributos del Estado en función del censo y los impuestos municipales.

Servicios de calidad

"Los pequeños municipios con población inferior a 2.000 habitantes deben asumir el coste que produce la prestación de servicios no sólo para sus vecinos sino también para esta ingente cantidad de peregrinos, no contando con ningún tipo de ayuda económica por parte de las administraciones públicas", insiste el PSOE.

Por eso, y porque los servicios que utilizan estos peregrinos deben ser de calidad "superior al resto de entes locales" para dar una buena imagen a todos los visitantes, los socialistas creen "prioritario" ayudar a estos ayuntamientos a sostener sus infraestructuras.

Así, pide al Ejecutivo que los pequeños municipios con una población flotante que cuadriplique la censada reciba, a través de la participación de los ingresos del Estado, una "compensación económica que mitigue el esfuerzo realizado por estar ubicados en el Camino de Santiago y por mantener los servicios públicos adecuados", o que "al menos se les equipare y reciban lo mismo por habitante que los ayuntamientos con mayor población".