El Consejo de Gobierno de la Junta, en su reunión de este jueves, ha aprobado subvenciones por un importe total de 28.965 euros para financiar las actividades de las bibliotecas de las universidades públicas de Castilla y León. Desde el año 2001, la Junta ha invertido en las bibliotecas de las universidades públicas 8.117.385 euros.

Estas aportaciones, enmarcadas en el Consorcio de Bibliotecas Universitarias de Castilla y León (BUCLE), han sido consensuadas con las cuatro instituciones académicas públicas de la Comunidad con el siguiente reparto: 3.832 euros para la Universidad de Burgos, 1.381 euros se destinarán a la Universidad de León, 11.876 euros se dirigirán a la Universidad de Salamanca y la misma cantidad se asignará a la Universidad de Valladolid.

Las universidades de la Comunidad constituyeron en 2002 el consorcio de Bibliotecas Universitarias de Castilla y León (BUCLE) con el ánimo de aprovechar sinergias y facilitar el desarrollo de acciones conjuntas.

Entre sus objetivos se encuentran la renovación tecnológica, la puesta en marcha de un programa de alfabetización informacional, la dotación de fuentes de información electrónica para el apoyo a los investigadores, así como la puesta en común de bibliografías y formación del personal de dichas bibliotecas.

Este esfuerzo conjunto realizado desde hace 13 años ha supuesto para las cuatro universidades públicas de la Comunidad un salto cualitativo de los recursos disponibles para la gestión automatizada y los recursos informáticos y recursos de información científico-técnica, lo que ha propiciado la creación en la red de catálogos y fondos bibliográficos y el acceso a bases de datos en los campos científicos y sociales, convirtiéndose así en bibliotecas de referencia a nivel nacional. Además, se realizan anualmente renovaciones de equipamiento y de servidores.

La cuantía total de la subvención se ha distribuido entre las cuatro universidades públicas conforme al reparto consensuado por ellas mismas dentro del consorcio. El objeto de estas ayudas es financiar las actuaciones que las bibliotecas de estos centros académicos están desarrollando en 2015 dirigidas a la dotación de fuentes de información electrónica para el apoyo del proceso investigador y a proporcionar continuidad a los recursos que tienen ya establecidos.