El consejero de Política Territorial e Interior del Ejecutivo autonómico, Antonio Suárez, ha explicado a más de 40 alcaldes el contenido de las órdenes, aprobadas por el Consejo de Gobierno de la pasada semana y publicadas este martes en el Boletín Oficial de Aragón (BOA), que regirán la concesión de las ayudas e indemnizaciones que se han ampliado a los afectados por las crecidas extraordinarias de los ríos Matarraña, Guadalope, Aguas Vivas, Huerva, Jalón, Huecha, Queiles y sus afluentes.

En declaraciones a los medios de comunicación, el consejero ha señalado que se dedican para estas localidades "las mismas ayudas que estableció el Gobierno de Aragón para las riadas del Ebro" registradas a finales de febrero y principios de marzo.

Así, se establece también un nuevo plazo para la presentación de solicitudes de las personas afectadas por las crecidas de estos siete ríos que "será hasta el 1 de junio con carácter general, salvo las que tienen quince días hábiles —hasta el 4 de mayo— desde la fecha de publicación de la orden", que se destinan a ciudadanos que colaboraron en las labores de protección civil.

Para presentar las solicitudes, los afectados pueden dirigirse a la oficina de Tramitación e Información puesta en marcha en la Expo, hasta el 1 de junio, así como a "cualquier registro, incluidas las oficinas comarcales y las oficinas delegadas" del Ejecutivo aragonés.

En el decreto figuran 49 municipios, "pero somos conscientes de que hay algunos que no están en esa relación y que están manifestando que han tenido también posibles daños", una docena de localidades, ha apuntado, para subrayar que "se está haciendo un esfuerzo importante" para otorgar con "celeridad" las ayudas.

Suárez ha observado que se han producido en el mismo mes la avenida extraordinaria del Ebro y "siete crecidas extraordinarias de siete ríos" que han provocado daños en municipios como Alcañiz, "pero en otros hay que verlos y diferenciar si son consecuencia de esta crecida o de otras situaciones".

AYUDAS

Las ayudas que se incluyen en el decreto son medidas destinadas a paliar daños materiales en viviendas y enseres domésticos, en explotaciones agrícolas, ganaderas y forestales, establecimientos industriales y mercantiles, y a favor de las personas afectadas.

Entre ellas, ayudas para resarcir los daños ocasionados a los particulares en viviendas, enseres domésticos y otros bienes muebles; acceso preferente a la Red de Servicios Sociales Especializados del Gobierno de Aragón y otros recursos sociosanitarios; y recursos para personas físicas o jurídicas que hayan efectuado prestación personal o de bienes.

También se contempla la indemnización de daños en producciones agrícolas, ganaderas y forestales; para la restauración de explotaciones agrícolas, ganaderas y sobre los gastos en explotaciones ganaderas; para resarcir los daños a establecimientos industriales, comerciales, turísticos y mercantiles y actuaciones para facilitar el acceso a la financiación para PYMES y autónomos.

Un segundo paquete de medidas pretende reparar infraestructuras y servicios públicos de titularidad municipal, de mancomunidades y comarcas; en infraestructuras públicas de riego; daños medioambientales; reparación de desperfectos en infraestructuras del ciclo integral del agua de titularidad autonómica y municipal y en carreteras.

Suárez ha resaltado que el Gobierno aragonés estableció también ayudas directas para actuaciones "que ya están haciéndose", como las que dependen del Instituto Aragonés del Agua, Agricultura o Carreteras. "Se está actuando desde el primer momento", ha defendido.

"ayudar a nuestros agricultores"

El alcalde de Ateca, Fernando Duce, ha indicado que en este encuentro desean "ser escuchados, atendidos y que nos den una solución para poder ayudar a nuestros agricultores", dado que la crecida del Manubles afectó especialmente a campos y fincas de particulares.

Duce ha recordado que en la localidad, en 2003, "hubo una gran riada que anegó el pueblo" y se actuó en la desembocadura del Manubles en el río Jalón gracias a una ayuda del Ministerio de Fomento y de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE). Ha apuntado que aún no han cuantificado los daños causados por la avenida.

Por su parte, el alcalde de Calaceite, José María Salsench, ha detallado que la riada del Matarraña causó problemas de turbiedad en el agua, si bien "llegamos a tiempo, cortamos el suministro y dejamos los depósitos llenos".

No obstante, hasta que no se ha limpiado el agua "hemos tenido que racionalizar el consumo" y depender de cisternas para llegar los depósitos y garantizar que "hubiera agua de boca en todo momento". "Hemos pasado verdaderos apuros", ha afirmado, para detallar que se construirá un pozo a "unos 25 metros" para que, si ocurre de nuevo este problema, "tengamos dos puntos de recogida, la captación natural y otra a profundidad" y evitar recoger agua turbia.

El alcalde de Cosuenda, Óscar Lorente, ha señalado que el agua causó daños en infraestructuras rurales, caminos y en los diques y escolleras construidos por la Confederación Hidrográfica del Ebro. "Hemos mandado cartas con solicitudes y fotografías a Sarga, a la CHE y a la Diputación de Zaragoza" que, "como siempre, es la primera que ha actuado y ha estado haciendo las cosas más urgentes".

"Esperamos que la CHE y Sarga también vengan e intenten ayudarnos para arreglar los destrozos", ha comentado. En Cosuenda no han valorado aún los daños pero los problemas en los diques serán "costosos y conviene repararlos porque si no ya no tendrán la función que tenían y era una inversión muy importante, que hicieron hace cinco o seis años".

La alcaldesa de Castelserás, Ángela Montañés, ha relatado que en la localidad se desbocó el Bergantes y "bajó muchísimo caudal, más de 500 metros cúbicos", afectando a un camino, un parque, propiedades privadas "y la pasarela se nos fue al carajo". Los desperfectos podrían ascender "por lo menos a 100.000 euros".