¿Cómo acabar con la plaga de gorrillas que han tomado las calles de Valencia? Es la pregunta del millón que se hacen los miles de valencianos que se ven obligados a pagar por la zona azul y, al mismo tiempo, al aparcacoches de turno y para la que nadie parece tener respuesta.

De hecho, parece que cada vez hay más impunidad, a tenor de los diferentes datos recopilados por 20minutos. Así, fuentes de la Fiscalía de Valencia han informado de que durante el año pasado tan solo abrieron diligencias judiciales contra 22 gorrillas por coacciones o agresiones, menos de la mitad de los que fueron llevados ante el juez en 2013 (61).

Y es que, como avanzó este periódico, la Policía Local de Valencia tiene desde 2013 órdenes de no llevar ante el Ministerio Público a los gorrillas que eran sancionados tres veces, acusados de desobediencia a la autoridad.

Este procedimiento se abortó, ya que la mayoría de denuncias judiciales contra los gorrillas por pedir dinero en la calle se desestimaban en los juzgados, y las pocas que prosperaban y acababan en juicio terminaban en pequeñas multas que la mayoría no suelen pagar al declararse económicamente insolventes.

La presión policial también ha bajado en los últimos años en la ciudad de Valencia. En concreto, los agentes multaron por la Ley de Seguridad Vial a 638 gorrillas el año pasado, por los 803 de 2013 y los 1.579 sancionados en 2012.

Fuentes sindicales de la Policía Local han reclamado en varias ocasiones un endurecimiento de las leyes para poder atajar este fenómeno.

Según se desprende de una respuesta del equipo de Gobierno municipal al PSPV, la Policía Local tiene detectada presencia amplia de gorrillas en las inmediaciones del Hospital General, así como en las calles Juan Llorens, Norte, San Jacinto, Convento Jerusalén, Alameda, avenida de Aragón, Blasco Ibáñez, centro comercial Arena, paseo marítimo e inmediaciones de Tráfico.