El Departamento de Obras Públicas del Gobierno de Aragón está trabajando "intensamente" en las tres carreteras autonómicas que se vieron afectadas por la crecida del río Ebro, ocasionando importantes daños en las infraestructuras viarias. Los trabajos están avanzando "a buen ritmo".

Junto a las propias brigadas de carreteras del Ejecutivo aragonés, están actuando con agilidad las empresas adjudicatarias de las labores de emergencia en la A-1107 en Pina, la A-126 en Remolinos y la antigua A-127 en Gallur.

El director general de Carreteras del Gobierno de Aragón, Miguel Ángel Arminio, ha realizado un recorrido por las tres carreteras para comprobar el desarrollo de los trabajos que se están ejecutando con el objetivo de recuperar la normalidad en el menor tiempo posible.

Con respecto a la carretera A-1107, en la que se abrió intencionadamente un tramo de 60 metros para aliviar la presión del río sobre la localidad zaragozana, Arminio ha señalado que "estamos haciendo una reposición provisional del paso para que puedan circular los vehículos de un extremo a otro porque ahora está la carretera cortada".

"Lo estamos haciendo por un punto diferente de la traza, es como si fuera un recorrido alternativo. De esta forma, en la misma traza de la carretera podemos hacer una obra de drenaje mientras los vehículos podrán ya circular por este paso provisional", ha indicado.

En la a-126

Posteriormente, el director general de Carreteras se ha desplazado hasta la carretera A-126, desde el kilómetro 47+100 al 52+650 de Alagón a Remolinos. Las labores que se acometen por un lado del punto kilométrico 47 al 51 consisten en la elevación de la rasante de la carretera en unos 1,50 metros, inundada por el cauce del río, con el fin de evitar esta circunstancia en nuevas crecidas. Asimismo, es preciso la limpieza y reposición de las cunetas afectadas, y de las canalizaciones y señalización existente.

Por otra parte, entre los kilómetros 52,500 al 52,650 se va a realizar la reconstrucción de dos acequias y la reparación del firme existente, con el fin de devolver la calzada a las condiciones de seguridad y de transitabilidad adecuadas. Arminio ha explicado durante su visita que todos estos trabajos se van a ejecutar con tráfico.

El director general de Carreteras ha detallado que las afecciones se encuentran "en unos 10 kilómetros. Hay de todo tipo: mordeduras en la carretera, socavación de firme, afección en parcelas colindantes que también nos han afectado, algún descalce y también vamos a tener que reponer el firme existente que se ha quedado bastante dañado, aunque estamos trabajando con tráfico en las dos calzadas, y las afecciones son menores", ha matizado.

ANTIGUA A-127

Finalmente, el director general de Carreteras ha comprobado las obras de reparación que se están ejecutando en la antigua carretera A-127 donde "tenemos daños similares a los de la carretera de Remolinos, esto es socavaciones, daños de firme, algunas zonas en las que el agua se ha filtrado por debajo y nos ha ahuecado la carretera, también vamos a realizar reposición de señalización, todo con la finalidad de recuperar las condiciones más adecuadas para la circulación", ha subrayado.

De esta forma, el Gobierno de Aragón continúa trabajando en la recuperación de las infraestructuras viarias para que estén completamente reparadas en el menor tiempo posible y en correctas condiciones.