Puede que algunos hayan entendido que son 22 minutos de penetración, ya que en estas encuestas lo único que se valora es precisamente la penetración en la que es necesario que el pene esté en erección, sin valorar otro tipo de relaciones.

No sabemos cuántas personas prefieren no hacer coito, ni cuántas mujeres consiguen el orgasmo por otros medios; ni siquiera se ha preguntado por el grado de satisfacción masculina si su compañera de cama alcanza uno o varios orgasmos, o cómo se siente una mujer ante la falta de deseo de su hombre.

Porque el tópico dice que los hombres son impotentes y las mujeres anorgásmicas o frígidas, pero ¿es esto verdad? ¿Qué pasa con los hombres frígidos, y con las mujeres que no lubrican? ¿Qué pasa con las parejas que desean con distinto ritmo? ¿Cómo miden las encuestas estos problemas?

O a lo mejor, como no hay medicamentos para ellos para los laboratorios no existen y por eso en sus encuestas no preguntan por ellos. La vida sexual de los humanos es mucho más que tres veces y 22 minutos, un acto sexual puede durar un día entero y la satisfacción no depende de la duración del pene en erección".

Pilar Cristóbal