Urboparma, una empresa subcontratada por FCC, a la que el Ayuntamiento de Madrid adjudicó parte de las obras de la M-30 podría hacer cometido un delito de explotación laboral, según desveló ayer Cuatro.

Al parecer, los trabajadores realizaban jornadas de 12 y 14 horas durante siete días a la semana, algo que Urboparma niega.

Tras la denuncia de esta cadena de televisión, el Ayuntamiento ha decidido abrir un expediente a la compañía.

También se pedirá que se investiguen las circustancias en que fueron contratados los trabajadores, ya que puede existir otro posible delito de reclutamiento ilegal.

A los obreros se les daba documentación falsa y se les envíaba directamente a Urboparma.

Una vez acabadas las obras y en el momento en que iban a cobrar sus honorarios fueron detenidos en las dependencias de la empresa por presunta falsedad documental.