El candidato del PSOE a la Alcaldía de Valladolid, Óscar Puente, y el portavoz del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento, Javier Izquierdo, han asegurado que tienen intención de elaborar un nuevo documento del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de acuerdo con sus ideas sobre la concepción de la ciudad si llegan a la Alcaldía tras las Elecciones Municipales de mayo.

Izquierdo y Puente han ofrecido una rueda de prensa este martes para manifestar su rechazo al documento de revisión del PGOU que previsiblemente se aprobará mañana miércoles en Pleno Extraordinario ya que considera que no está suficientemente culminado y que incluye "errores reconocidos" por el equipo de Gobierno del PP.

A juicio de los ediles socialistas el documento de revisión que se presentará mañana en el Pleno "responde a la idea que tiene el PP" del urbanismo, lo que ha creado una ciudad "expandida, más dispersa y más cara" y que, como ha reprochado Izquierdo, y más preocupado "por atender las demandas de los promotores inmobiliarios" y "salvar la papeleta de las áreas homogéneas".

Por todo ello, Puente ha recalcado que si sale elegido alcalde en el mes de mayo elaborará un documento nuevo basado en la idea de ciudad que el PSOE entiende que más necesita Valladolid y también basado en la participación, algo que consideran inexistente en el actual proceso de revisión.

Asimismo, Javier Izquierdo se ha mostrado convencido de que si Óscar Puente es alcalde el PGOU responda "a las necesidades reales de la población" que en muchas ocasiones se enfrenta a las dificultades para encontrar o mantener su vivienda, y también a las necesidades de suelo industrial para favorecer el crecimiento económico.

"Un gobierno nuevo debe de tener un PGOU que responsa a su idea de ciudad", ha recalcado el candidato a la Alcaldía, que ha abogado por que Valladolid "no se expanda urbanísticamente", sino que lo haga en términos demográficos y que, con ello, sea más barata de mantener.

Entre los errores y problemas que los socialistas han señalado en la revisión del PGOU, han mostrado una especial preocupación por la posible suspensión de la concesión de licencias urbanísticas hasta que el documento no se apruebe definitivamente.

Según ha explicado Javier Izquierdo, de acuerdo con la normativa urbanística de Castilla y León, durante ese período, "hasta un máximo de dos años", se suspende la concesión de licencias en las áreas de la ciudad que sufran algún cambio de régimen urbanístico y que en este caso sería "la mayor parte de la ciudad".

Así, puede suceder que se impugne la concesión de una licencia y que los tribunales lo admitan en casos como las reformas de viviendas del proyecto 'R2Cities' en el barrio de Cuatro de Marzo, la obra para instalar un ascensor, por ejemplo, en un edificio de La Rondilla, o las promociones previstas por VIVA en los antiguos terrenos de Metales Extruidos en la avenida de Burgos.