Parlament acuerda presentar una denuncia ante la Comisión de Competencia por la situación de los carburantes en Baleares

El PP también ha dado el visto bueno a la elaboración de un estudio "urgente" sobre los precios de carburante en Baleares frente al resto del país

El Parlament ha aprobado por asentimiento seis de los ocho puntos de la proposición no de ley presentada por el grupo MÉS relativa a los precios de los carburantes en las Islas Baleares, entre los que figura la elaboración de un estudio "urgente" sobre la situación de las gasolinas en Baleares en comparación con las del resto del Estado.

La Comisión de Economía, celebrada este jueves, también ha acordado presentar una denuncia sobre esta situación ante la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, así como enviar a los inspectores de Consumo "para comprobar que las estaciones de servicio cumplen con toda la normativa que hace referencia a consumo y precio".

Además, se ha acordado impulsar la implementación de las gasolinas 'low cost', como una forma de aumentar la libre competencia.

Por su parte, el grupo socialista ha dado apoyo a todos los puntos de la iniciativa, mientras que el PP, también ha aceptado todos los apartados de la PNL, menos dos de ellos.

En un comunicado, desde el grupo MÉS han señalado que "hay datos objetivos que apuntan hacia esta concertación de precios", como es el hecho de que sólo en Baleares se paga aún más de un euro por gasóleo, cuando en el resto del Estado no es así.

Precios por encima del euro

Según los datos aportados por la coalición, los precios van desde del 0,82 euros en Canarias y 0,92 euros en Murcia a 1 euro en Andalucía, mientras que en Baleares la estación que ofrece el precio más barato es 1,11 euros, muy por encima de la media estatal.

Las Islas Baleares constituyen una excepción en España, ya que es el único lugar donde no se puede conseguir gasóleo por un euro o menos. También Baleares es donde cuesta más la gasolina. El precio de 60 litros de gasolina 95, incluido impuestos, asciende a 87,5 euros, lo que supone 4,4 euros más que la media estatal.

El diputado Miguel Ángel Mas, que ha defendido la iniciativa, ha explicado que "estas prácticas contrarias a la competencia son claramente perjudiciales para los consumidores y para la economía balear en general", ya que encarece todos los productos y servicios, en la medida que los carburantes fósiles constituyen la principal y casi única fuente de energía para el transporte.

"Esta situación supone un grave perjuicio para los ciudadanos baleares", ha lamentado al respecto.

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