La Unión de Pequeños Agricultores (UPA) de Andalucía ha presentado una nueva denuncia por lo que considera "venta a pérdidas" de aceite de oliva, de modo que ha exigido mayor coordinación de las administraciones implicadas para erradicar esta "práctica abusiva" de la distribución.

En concreto, se dirigen contra Carrefour por su oferta de un envase de cinco litros de aceite de oliva virgen en el que cada uno vale 2,35 euros y está "claramente por debajo del precio de adquisición" en origen. Y es que, tomando como referencia el sistema Pool, desde el pasado 12 de octubre el valor "suelo" para este aceite es de 2,40 euros y la media se ha situado en los 2,9.

"Se sigue vendiendo a pérdidas", ha manifestado a los periodistas el secretario general de la organización, Agustín Rodríguez, antes de registrar en la Subdelegación del Gobierno y en la Delegación de la Junta en Jaén la denuncia dirigida a la Agencia de Información y Control Alimentario (ICA) y a la Dirección General de Comercio de la Consejería de Turismo y Comercio.

Rodríguez ha recalcado que acabar con este tipo de actuaciones es una "exigencia" ya no sólo de la producción, sino también de los envasadores. En este punto, ha expresado su satisfacción por que estos "se hayan sumado", aunque ha animado a no quedarse en la denuncia pública y plantearla también formalmente en los organismos correspondientes.

En su opinión, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente debe "reforzar o incluso revisar las normas" para perseguir estos "abusos", al tiempo que ha incidido en que las comunidades con competencias en Comercio tienen que "reforzar también" su intervención atendiendo las posibles denuncias de investigación y ejerciendo sus funciones de inspección.

Al hilo, ha señalado que las regiones "con carácter general, no están haciendo su trabajo en materia de inspección" y "ni siquiera atendiendo debidamente las denuncias". "Por eso exigimos, mayor coordinación e implicación de las comunidades autónomas", ha aseverado.

A su juicio, esa cooperación efectiva con el Ministerio "sería un paso de gigante", ya que existe "un sistema teóricamente coordinado, que si no falla, al final terminarán pagando estas prácticas ilegales". Rodríguez, que ha recordado que UPA ha interpuesto 15 denuncias desde la entrada en funcionamiento hace un año de la referida Agencia de Información y Control Alimentario, ha destacado que "algunas tienen un recorrido positivo".

Como ejemplo, ha hablado de una sanción en Murcia "por la misma denuncia que en otras comunidades a los seis meses han dicho que no investigan porque ya se ha pasado el plazo". Al respecto, ha incidido en la necesidad de coordinación teniendo en cuenta que los gabinetes jurídicos de la distribución trabajan "para intentar que en el momento que los plazos no se cumplen, caduquen" los expedientes.

DISFUNCIONES

Por otro lado, ha aludido al dato ofrecido por la consejera de Agricultura, Elena Víboras, quien afirmó que la Junta realiza unos 3.000 controles en el sector del aceite y "y no llega al ocho por ciento en los que ha aparecido algún tipo de disfunción".

El secretario general de UPA-A, ha incidido en "son dos cosas absolutamente distintas". "Una inspección en una almazara, en una cooperativa, en una envasadora, antes de que salga para ponerse en los lineales, es algo que ya se ha visto minoritario, no representativo, no pone de manifiesto el problema. Y de lo que nosotros hablamos es cuando ese aceite llega al lineal y se pone un precio que es venta a pérdidas", ha comentado.