El alcalde de Alicante, Miguel Valor, ha defendido este lunes la presunción de inocencia y "de todos los imputados sin sentencia" judicial en referencia a la exalcaldesa, Sonia Castedo doblemente imputada en el caso Brugal, y del vicealcalde, Andrés Llorens, procesado en el 'caso Magallanes'.

Valor ha utilizado sus primeras palabras en el pleno extraordinario de Hacienda celebrado este lunes en el inicio de "esta nueva etapa, que ójala no hubiera sido necesaria", para afirmar que el tiempo "pondrá a cada uno en su lugar", tras asegurar que cree "profundamente" en la presunción de inocencia y "en los jueces y la Justicia".

Además, al término del pleno, Valor ha reiterado, a preguntas de los medios, que "ha sido injusto lo que ha ocurrido en este Ayuntamiento" y ha argumentado que debe "defender hasta el final" a sus compañeros "hasta que no haya un fallo de la Justicia, en la que creo profundamente. Verdaderamente no teníamos que haber llegado hasta aquí".

Repreguntado al respecto, ha señalado que "ójala no hubiera pasado lo que ha pasado el Ayuntamiento" y ha remarcado que sus palabras eran "una defensa, siempre" de la figura de Sonia Castedo, "de Andrés Llorens y de todos los imputados que no tienen una sentencia. Como compañero y he vivido con ellos y sé que hemos hecho siempre bien".

Por ello, ha insisitido en que "ójala no hubiera tenido que dimitir" Sonia Castedo, "con lo que no estaría aquí, pero el Ayuntamiento estaría más tranquilo".

Respeto en el pleno

Asimismo, en sus primeras palabras ante el pleno, Valor ha rogado a "todos los concejales que me hagan un gran favor": "todo se puede debatir, las discrepancias son lícitas para una buena salud democrática, pero dentro de un orden y con respeto mutuo". "Ante todo guardando las formas", porque "Alicante nos lo agradecerá", ha zanjado.