Mercedes Boix ha conseguido reunir los avales necesarios para poder concurrir al proceso de primarias abiertas que Izquierda Unida de Cantabria ha puesto en marcha para asignar a la persona que encabece el proyecto político de la formación de la región. .

Boix, doctora y defensora de la sanidad pública, que anunció esta semana su intención de presentarse a las primarias, ha recogido cerca del 50% de los avales entre la afiliación.

Pero, para ella, "lo positivo" no es la cantidad de apoyos logrados, sino "la ilusión que ha generado entre la afiliación y sus entornos". "Al final, de lo que se trata es de transformar esa ilusión en lograr representar el proyecto político colectivo de IU", señaló.

Boix, que nació en Barcelona, se trasladó a Cantabria a estudiar la carrera de Medicina y posteriormente desarrolló la especialidad de Ginecología y Obstetricia en la Universidad de Salamanca. Eligió esta rama por el interés que le suscitaban los problemas de salud sexual y reproductiva de las mujeres.

Tras terminar la especialidad tuvo la oportunidad de comenzar a trabajar en el Centro de Planificación Familiar de La Cagiga, siendo la primera ginecóloga con la que cuenta el Centro. En su siguiente destino, Laredo, participó en la puesta en marcha del primer Hospital Comarcal en Cantabria.

Su carreta profesional siempre ha estado vinculada al sistema público de salud, actualmente trabaja en el Hospital de Valdecilla. En 2002, junto con un grupo de profesionales, retomó el trabajo de la Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública (ADSP), que en 2011 se integró en la Plataforma Cantabria por lo Público, para "dar conjuntamente respuesta al ataque del PP contra la sanidad pública", bajo la máxima de que "La sanidad no se vende, ¡se defiende!" y acciones como los abrazos a los hospitales de Valdecilla y Laredo.

Boix también ha participado en diversos proyectos de cooperación en el terreno, ya durante diez años ha formado parte de las expediciones médicas al Sáhara Occidental en la Daira de Auserd, desarrollando su trabajo integrando parte del equipo que se ocupaba del programa de salud maternal.

También ha estado desarrollando tareas de ayuda en Benín, uno de los países más pobres, donde su labor consistía en descargar de trabajo al único ginecólogo formado del hospital.

Se ha incorporó a Izquierda Unida hace más de un año, al entender que así podía "traducir" el "descontento social" y su "lucha en la calle" en un "proyecto colectivo de izquierdas, que pueda plantear una alternativa para una mayoría".