El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha defendido que la "prioridad" ahora en la Cámara autonómica es negociar y aprobar "en los próximos meses" las medidas que planteó en su día de lucha contra la corrupción, que incluían, entre otras, la limitación de la financiación de los partidos políticos y la reducción de las campañas electorales, y no el recorte de diputados.

En la rueda de prensa posterior al Consello de la Xunta, ha defendido que lo que demandan los ciudadanos es priorizar las actuaciones de "impulso democrático" en un escenario marcado por distintos casos de corrupción que salpican a los diferentes partidos, y ha asegurado que no quiere que la reforma electoral para el recorte de escaños, de la que discrepa profundamente la oposición, se use "de excusa" para no hablar de estas medidas.

Feijóo ha recordado que Galicia está "en el ecuador de la legislatura" y que aún quedan dos años para los próximos comicios, que es cuando tendría efectos prácticos la reducción de 75 a 61 que plantea el PP, al tiempo que ha justificado los sucesivos aplazamientos de la reforma electoral.

"No quiero que se use como excusa la reducción de parlamentarios para no hablar de las medidas de impulso democrático que son las que más interesan a la opinión pública", ha aseverado, para añadir que la "prioridad" ahora es "intentar consensuarlas" con el resto de grupos.

En su día, ya expuso al líder del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, estas medidas en un encuentro bilateral, aunque el socialista condicionó entonces cualquier negociación a que éste compareciese en la Cámara para explicar los casos de supuesta corrupción que salpican a su partido.

Este jueves Feijóo ha insistido en que hay que negociar porque que las medidas salgan adelante es una "prioridad" y se ha reafirmado en que no desea "intoxicar" esta cuestión con la de la reforma electoral.

Clima electoral

Acerca de si el clima electoral que se avecina no dificultará aún más un acuerdo sobre el recorte de diputados, Feijóo ha rechazado este extremo, pese a constatar que quedan dos años hasta las autonómicas marcados por la cita de las municipales, de las generales y también por el adelanto electoral catalán.

"No sabemos cuál es el clima para los próximos años y es difícil que sea peor. Ahora nosotros tenemos como prioridad acordar las medidas de impulso democrático y no queremos que la reducción de diputados se utilice como una excusa para no hablar por parte de los partidos que no estén de acuerdo", ha zanjado.