La concejala de Economía y Hacienda, María del Mar Martín Rojo, ha salido este miércoles al paso de las críticas vertidas por el grupo municipal de IU sobre la recaudación de impuestos y la "simbólica" bajada impositiva en la ciudad. Así, la edil ha reiterado que Málaga capital está entre las ciudades españolas con una menor presión fiscal.

Ha aludido a diversos estudios realizados por entidades independientes como es el caso de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) que, tras analizar las ciudades de Málaga, Bilbao, Valencia, La Coruña, Valladolid, Barcelona, Madrid y Sevilla concluye que de estas ocho la capital malagueña es en la que menos ha subido el IBI en los últimos cinco años.

También ha recordado otros informes como el del Colegio de Economistas de Málaga, del portal de transparencia fiscal (portalestadístico.com) o el del Instituto de Estudios Fiscales, con datos relativos a 2012, que explica que en concepto de IBI la recaudación per cápita en Málaga es de 178 euros, frente a los 213 euros de media que recaudan los municipios estudiados, aquellos con más de 100.000 habitantes.

Martín Rojo ha sostenido en un comunicado que la clasificación más reciente, en concreto de 2013, publicada por el Ayuntamiento de Madrid sitúa a Málaga en el puesto 27 con relación al esfuerzo fiscal absoluto de IBI, por debajo de Sevilla (que tiene la décima posición), Madrid (17) y Barcelona (21). Además, ha añadido que si se tiene en cuenta tanto la cuota del IBI como la tasa de basura, Málaga se encuentra en la posición número 46 de 48 municipios españoles.

La concejala ha subrayado el "esfuerzo" realizado por el Ayuntamiento de Málaga para contener la presión fiscal, especialmente desde el inicio de la crisis económica y ha recordado que la actualización de valores catastrales sobre los inmuebles urbanos de la ciudad lograda por el Consistorio y con efectos desde este mismo año, unida a la nueva congelación en el tipo de gravamen del IBI, producirá una reducción en las cantidades a liquidar por este tributo hasta el año 2018 (fin del plazo del ajuste de los nuevos valores catastrales) de unos 90 millones de euros.

Esa cantidad, ha continuado, se suma a los 105 millones de euros que el Ayuntamiento "ha dejado de cobrar desde 2009 mediante la aplicación de bonificaciones a este tributo y a los aproximadamente 80 millones que también dejó de ingresar en 2013 y 2014 como consecuencia de la reducción del tipo de gravamen un 35 por ciento".

Respecto a las bonificaciones, Martín Rojo ha recordado que desde que el Ayuntamiento de Málaga comenzó a otorgar ayudas para el pago del IBI, unas 51.600 familias se han beneficiado de ellas, con algo más de cinco millones de euros; ayudas a las que se suman los beneficios fiscales a familias numerosas "que han hecho posible que cada año en torno a unas 2.500 familias haya dejado de abonar un total de 350.000 euros".

La concejala también ha subrayado que el Ayuntamiento de Málaga no cobra IBI a los adjudicatarios de VPO, "a diferencia de otras administraciones como la Junta de Andalucía". Además, el Consistorio malagueño también tiene establecidas bonificaciones del 50 por ciento de la cuota del IBI para los propietarios de viviendas de VPO, durante tres años adicionales a los que son de aplicación obligatoria por ley.

"Málaga es una de las pocas ciudades españolas que no aplica directamente la tasa de recogida y tratamiento de residuos sólidos urbanos para las viviendas", ha apostillado la edil, quien ha añadido que este año 2015 se experimentarán reducciones en ciertas tasas por entrada y salida de vehículos, así como una nueva bonificación en el ICIO.

Ha recordado que la "buena gestión económica" del Ayuntamiento ha permitido que no haya tenido que acogerse a los planes de pago a proveedores del Gobierno Central, y "ha evitado que el Ayuntamiento se vea obligado a subir todos sus impuestos, tal y como establece la ley".

Martín Rojo ha aludido a la reducción experimentada en 2014 por las tasas por ocupación de la vía pública con quioscos, mesas, sillas, toldos y otros elementos; una bajada media del 21,74 por ciento en el caso de las cuotas de mesas y sillas y del 37,5 por ciento en el caso de los quioscos de la que se han podido beneficiar este año el 95 por ciento de los contribuyentes y que en algunos casos ha conllevado que el importe a abonar se sitúe por debajo incluso del que abonaron en 2012.

Por último, ha manifestado que se mantienen las facilidades de pago para los diversos impuestos, lo que posibilita a los contribuyentes a elegir el número de veces en las que quieren abonar sus recibos sin recargos ni intereses, mediante la domiciliación bancaria.