El Gobierno ha fijado las prioridades de los espacios españoles que están incluidos en la red europea Natura 2000, y ha identificado además todas las posibles vías de financiación que esos lugares pueden tener hasta el año 2020 con el objetivo de asegurar la conservación de los hábitat y las especies.

Ha concluido ahora el proyecto Life + Marco de Acción Prioritaria Natura 2000, una iniciativa financiada por la Unión Europea que se ha prolongado durante más de dos años y que ha permitido disponer de la primera "foto fija" de la red Natura 2000 en España.

España es el país europeo con una más rica biodiversidad y el que que más espacios suma a esa red: más de 2.000, que representan casi el 30% de la superficie.

Según ha recordado hoy el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, el citado proyecto Life + ha servido para identificar todos los instrumentos de financiación de la red Natura 2000 española en el reparto de fondos comunitarios para el periodo 2014-2020. El Marco de Acción Prioritaria Natura 2000 establece cinco prioridades estratégicas y propone doscientas medidas concretas para la conservación de los espacios españoles que pertenecen a esa red.

El trabajo que se ha ejecutado durante más de dos años ha sido coordinado por la Fundación Biodiversidad y la dirección general de Calidad y Evaluación Ambiental y Medio Natural, del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.

Las principales prioridades de la red Natura 2000 en España hasta 2020 que se han plasmado en ese proyecto son: mejorar el conocimiento para la gestión de esos espacios; asegurar la gestión eficaz de los espacios protegidos Red Natura 2000; mantener o recuperar el estado de conservación favorable de los hábitat y de las especies. Y también mejorar la formación y la sensibilización hacia estos espacios.

Además de los recursos de financiación tradicional a través de fondos europeos, durante la ejecución de este proyecto se han analizado y estudiado otras formas de financiación "innovadoras", y entre éstas los fondos de capital, los fondos verdes, los impuestos, las tasas, los beneficios fiscales, los créditos de carbono, el pago por servicios ambientales o los bancos de conservación.