El meteoro o bólido que atravesó el pasado jueves la Península y que pudo ser observado desde Sevilla hasta Barcelona tenía cerca de una tonelada de peso y era mayor que el que cayó en un pueblo de Palencia el 4 de enero de 2004, según datos recabados por la Red Española de Investigación sobre Bólidos y Meteoritos. Los datos de testigos han podido determinar que el bólido entró en la atmósfera, sobre el centro de la Península (y a una velocidad estimada de entre 50.000 y 100.000 kilómetros por  hora), minuto y medio antes de las ocho de la tarde del jueves. «La luminosidad del bólido diurno fue intermedia a la de la Luna y el Sol, aunque en sus fulguraciones pudo incluso rivalizar» con esa estrella, aseguraron fuentes de la Red Española, que ahora intenta localizar sus fragmentos.