Trescientos alumnos vascos de 4.º de ESO están escuchando estos días desde su pupitre el testimonio de víctimas de ETA y de los GAL. Es una iniciativa piloto del Gobierno vasco que pretende sembrar valores democráticos y pacíficos entre las nuevas generaciones de ciudadanos. Una sociedad que construye la paz, se llama.

A estos chavales llegan testimonios escritos por víctimas «para poner sobre la mesa el sufrimiento injusto e injustificable», explicó ayer Ion Landa, director de Derechos Humanos del Gobierno vasco.

Pero estas voces no buscan sólo la transmisión del mensaje a las aulas. Persiguen la reacción, «mover al compromiso», matizó Landa. Estos 300 escolares forman parte de un proyecto piloto en seis colegios públicos y privados de Euskadi (tres en Vizcaya, dos en Guipúzcoa y uno en Álava).

La iniciativa se compone de una unidad didáctica de diez horas de duración, que se ha desarrollado en sesiones de una hora en los meses de marzo, abril y mayo.

Después, habrá otras cuatro horas para evaluar la dinámica. Esto es «lo que más interesa», explicó ayer Ion Landa. La idea es continuar con esta iniciativa, aunque el Gobierno vasco aún no ha definido si se extenderá a todos los centros.

«El ambiente ha sido magnífico», aseguró el responsable del Ejecutivo vasco. Según él, alumnos, profesores y directores han acogido con los brazos abiertos la iniciativa. Ahora toca conocer si ha surtido efecto.

En inglés, como en castellano

La educación trilingüe cada vez es más habitual en Euskadi. Sin embargo, hasta ahora no se conocían con exactitud los resultados que aportan estudiar materias tanto en castellano como en euskera y en inglés o francés. Ayer el Gobierno vasco presentó un informe, elaborado en 23 centros, según el cual los alumnos que estudian una asignatura en inglés o en francés adquieren el mismo nivel de conocimientos de la materia en cuestión que si la recibieran en castellano.