Los pescadores gaditanos estiman que el hecho de que tanto las embarcaciones portuguesas como españolas abran la pesquería de la sardina el 1 de marzo al objeto de contar con más tiempo para la regeneración de los caladeros es "un inconveniente más" para el sector, pero a la vez "un gesto responsable" para que la especie "se recupere en el caladero".

Así lo precisa el presidente de la Asociación Barbateña de Empresarios de Pesca (Abempe), Tomás Pacheco, que se lamenta de que "Europa no tiene en cuenta" que el Golfo de Cádiz "está sujeto a planes de pesca desde 2004, con topes de captura de 3.000 kilos".

Critica que mientras que la flota del Golfo de Cádiz ha estado sujeto a esos planes de pesca, "otras comunidades autónomas han estado practicando la pesca olímpica; el sector pesquero que desarrolla su actividad en los caladeros del Golfo de Cádiz siempre ha estado velando por la regeneración de la especie y no se ha tenido en cuenta".

Explica que esta decisión incidirá en la ya "bastante difícil" situación económica del sector pesquero y, al hilo, resalta que "las cuotas de boquerón siguen siendo insuficientes".

Cabe recordar que el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama) y el sector pesquero del Cantábrico noroeste y el Golfo de Cádiz han mantenido este martes 30 de diciembre una reunión en la que se ha determinado que tanto las embarcaciones portuguesas como españolas abran la pesquería de la sardina el próximo 1 de marzo al objeto de contar con más tiempo para la regeneración de los caladeros.