Los sindicatos de Abanca y la dirección se han vuelto a citar para este viernes 26 tras más de nueve horas de reunión este martes sin acuerdo sobre los cambios que pretende la empresa y que afectan a la jornada laboral y a los sueldos.

Durante la tarde las negociaciones estuvieron "rotas", según ha explicado a Europa Press el representante de UGT, José Ramón De Pliego, quien indica que ahora la intención de las centrales se centra en eliminar cuestiones todavía sin aplicar del anterior expediente de regulación de empleo, todavía en vigor.

Esta larga jornada, que comenzó a las 11,00 horas en A Coruña, era la última de los 15 días que, como plazo mínimo, fija el periodo oficial de consultas iniciado por la dirección para modificar las condiciones laborales de la plantilla.

En concreto, la entidad financiera busca flexibilizar la jornada de los trabajadores, de modo que todos ellos tengan una jornada flexible, hasta las 19,00 horas, en función de las necesidades de cada oficina.

En cuanto a los sueldos, pretende equipararlos con los del resto del sector bancario, al contar los empleados de Abanca con condiciones diferenciadas resultado de su origen en la fusión de dos cajas de ahorro —Caixa Galicia y Caixanova—.

El viernes,

último día

Este martes era el último día antes de que el banco pudiese sacar adelante los cambios de forma "unilateral", como denuncia la CIG que los representantes de la entidad anunciaron que harían sobre las 17,00 horas. Sin embargo, finalmente las partes se han convocado para un nuevo encuentro, el viernes 26, para que sea este el último del periodo de consultas.

De acuerdo con lo que explica un portavoz de la central nacionalista presente en el encuentro, desde la tarde de este martes los directivos de Abanca se han ido reuniendo de manera aislada y también conjunta con representantes de CC.OO., Csica y UGT —las organizaciones con representación mayoritaria— para tratar de cerrar un acuerdo.

Pasadas las 21,00 horas todavía tratan de cerrar flecos pendientes para firmar el acta de la reunión, según señala el portavoz de UGT, José Ramón De Pliego Valdés.

Los representantes de los trabajadores presentaron contrapropuestas en los últimos días para reducir la voluntad de la empresa, pero critican que esta está "empeñada" en sacar adelante la modificación sustancial de las condiciones laborales, que basa en razones económicas y para dar un mayor servicio a los clientes.