La Estación Biológica Internacional (E.B.I.) y su representante en España, Europarques, han presentado dos denuncias contra la Junta de Castilla y León ante el organismo anticorrupción de la OLAF - Oficina Europea de Lucha contra el Fraude y ante la Dirección de Medioambiente de la Comisión Europea.

Las denuncias, según han apuntado desde Europarques, afirman que la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Castilla y León "financió con fondos europeos la construcción de cinco Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales (E.D.A.R.) en el entorno del Lago de Sanabria".

Según la versión de los denunciantes, "todas las depuradoras resultaron fallidas a partir del año siguiente al de su inauguración en el año 2000, y permanecieron inactivas hasta su denuncia pública por parte de la E.B.I. en el año 2013. A fecha actual, los vertidos persisten frente a la dificultad económica y escándalo público que supone la total reconstrucción del sistema, recomendada por el informe oficial de 2008 que permaneció oculto en la Junta de Castilla y León durante 6 años, hasta su filtración a los medios y posterior reconocimiento por parte del Consejero de Medioambiente en su intervención en Cortes de 29 de abril de 2014", han señalado en la denuncia.

Asimismo, han indicado que, tras años de "desmentidos oficiales al más alto nivel", incluido el del entonces ministro Arias Cañete, la Junta de Castilla y León "no tuvo más remedio que ordenar a Insituform S.A. este verano el inicio de las obras de reparación señaladas en su propio informe oficial sobre las depuradoras, elaborado por Eurostudios entre 2006-2008, y que mantuvieron oculto hasta su filtración involuntaria a los medios".

Retirada diarias de miles de residuos fecales

Para Europarques, durante toda la campaña turística 2014, la Junta "se ha visto también obligada a contratar los camiones cisterna de la empresa STLIMA para la retira diaria de miles de litros de residuos fecales de las cinco depuradoras que rodean las playas del Lago de Sanabria".

Con todo, han asegurado que "la nula eficacia y paralización de las depuradoras desde el año siguiente al de su inauguración en el 2000, se acredita también en el citado informe de Euroestudios en el que participó la propia C.H.D. - Confederación Hidrográfica del Duero, que determinó con claridad, tanto la ruina integral del sistema, como el origen del fósforo que ahora se pretende achacar políticamente a la ganadería y el cambio climático".

Por último, han recordado que más de 30 catedráticos y doctores en biología, coordinados por el doctor Guillén Oterino avalan y rubrican las investigaciones del buque hidrográfico de la E.B.I., solicitando al Magrama la inmediata paralización de los vertidos al Lago de Sanabria.

Durante toda la investigación sobre los vertidos contaminantes ya reconocidos en el Lago de Sanabria, la E.B.I. ha informado a los máximos responsables del Ministerio, de la C.H.D., de la Diputación de Zamora y de la Junta de Castilla y León, sobre todos los aspectos relacionados con la investigación de sus buques hidrográficos, incluidos los vertidos, "el boicot institucional, las amenazas recibidas y las posteriormente ejecutadas con reiterado desatino, pero inequívoca intencionalidad".