El consejero de Sanidad de Castilla y León, Antonio María Sáez Aguado, ha destacado la detección precoz del Sida como una de las preocupaciones actuales ante el Sida, ya que en los últimos casos "en gran medida" los pacientes desconocían haberse infectado.

Sáez Aguado, durante una rueda de prensa para presentar una nueva intervención quirúrgica con un modelo impreso en tres dimensiones, se ha expresado así con motivo del Día Internacional de Acción contra el Sida que se celebra este lunes.

El consejero ha recordado que Castilla y León es una de las comunidades autónomas españoles con menor prevalencia pero aún así ha incidido en que se trabaja directamente con diferentes entidades en el diagnóstico y detección precoz, atención e información, al igual que con los comités antisida en la labor de sensibilización e información que llevan a cabo.

Enfermedad crónica

Sáez Aguado ha explicado que se trata de una realidad "preocupante" pero no "especialmente llamativa" en Castilla y León, tras lo que ha apuntado que el desarrollo de las investigaciones han permitido que "en gran medida" se cronifique esta enfermedad derivada de una infección muy grave.

En este sentido, ha señalado que actualmente estas investigaciones han permitido que las personas que tienen Sida tengan unos estándares y calidad de vida "razonables".

La tasa de incidencia del Sida es de 1.213,65 casos por cada millón de habitantes en Castilla y León, donde la enfermedad acumula más de 3.000 casos y se han confirmado cinco nuevos durante la primera mitad de este año, en el que, inicialmente, se mantiene la tendencia a la baja de los años anteriores.

En Castilla y León a lo largo de 2013, tres de cada cinco personas diagnosticadas de sida en Castilla y León no eran conscientes de su contagio por VIH hasta el momento del diagnóstico y, de ellas, el 61,53 por ciento llevaban una media de diez años infectadas, sin saberlo y sin poder beneficiarse de los tratamientos actuales y del acceso más rápido a ellos, lo que contribuye a mejorar sus expectativas y calidad de vida, además de reducir el riesgo de transmisión de la enfermedad.