El PP ha criticado que el Gobierno vasco plantee la creación de "nuevos impuestos sin un control efectivo sobre el gasto público". Tras considerar que "no es de recibo" esta propuesta cuando el Ejecutivo "mira hacia otro lado y no quiere revisar la deficiente gestión de recursos públicos en materia social", ha advertido de que puede tratarse de "la avanzadilla" para realizar nuevos recortes sociales.

Por ello, los parlamentarios del PP Antón Damborenea y Laura Garrido realizarán el viernes en el pleno de control del Parlamento vasco sendas preguntas a los consejeros de Hacienda y Políticas Sociales sobre "los criterios" con los que pretenden aumentar la presión fiscal, propuesta realizada por Juan Mari Aburto para "costear" la atención de los servicios sociales.

El portavoz de los populares en materia económica, Antón Damborenea, ha destacado que el Gobierno vasco "tiene un problema, que es su deficiente gestión de los recursos públicos, y pretende que sean los ciudadanos los que se lo resuelvan pagando más impuestos".

En este sentido, ha criticado que el Ejecutivo autónomo esté más preocupado en que los ciudadanos paguen más impuestos que "en ajustar, en unos casos, y en controlar en otros, el gasto público". "Mientras el gasto corriente no deja de subir sin que se haga ninguna revisión o reflexión para optimizar la gestión de los recursos públicos, el Gobierno vasco propone pasar directamente la factura a los ciudadanos", ha apuntado.

Damborenea recordará el viernes en la sesión plenaria al consejero de Hacienda, Ricardo Gatzagaetxebarria, que la subida de impuestos "desincentiva el consumo, paraliza el crecimiento económico y ralentiza la creación de empleo".

"La receta del Gobierno vasco, no sólo no soluciona los problemas, sino que, además, es contraproducente en el momento en el que estamos todavía de crisis en el País Vasco", ha insistido.

Control del gasto

Por su parte, la parlamentaria del PP y portavoz de los populares vascos, Laura Garrido, preguntará también al consejero de Empleo y Políticas Sociales, Juan Mari Aburto, sobre su reciente propuesta de crear un "recargo impositivo" o un "impuesto específico" para pagar las ayudas a personas dependientes.

"Precisamente, el Departamento de Empleo y Políticas Sociales es un claro ejemplo donde existe margen para controlar el gasto, como es conocido, con 86 millones de euros de pagos indebidos en ayudas sociales", ha apuntado.

Por ello, considera que, "antes de plantear una iniciativa de este tipo, el Gobierno vasco debería autoenmendarse y corregir todas las deficiencias existentes en la gestión de los recursos sociales".

En su opinión, "no es de recibo" que el Gobierno vasco "quiera crear un nuevo impuesto, cuando mira hacia otro lado y no quiere revisar ni mejorar la deficiente gestión" de los recursos públicos en materia social. "La solidaridad en esta sociedad no es algo que esté en cuestión, pero debe ir acompañada de una gestión rigurosa de los recursos públicos", ha aseverado.

Garrido ha mostrado su preocupación porque el debate generado por el consejero de Empleo y Políticas Sociales pretenda "servir de avanzadilla" de nuevos recortes en materia social, como este año ha ocurrido, por ejemplo, con la suspensión de las ayudas a la conciliación. "No queremos que la falta de recursos sirva de excusa para realizar un nuevo recorte", ha advertido.