A. G., el hombre que se encontraba encaramado a una torre de electricidad en la ciudad de Murcia para protestar por "una condena injusta", ha dado fin a su protesta cerca de las 14.00 horas, tras la mediación de la Policía Nacional.

El hombre, condenado en 2010 por el homicidio de su primo en la pedanía murciana de Patiño, se subió a la torre, situada frente a un parque acuático, pasadas las diez de la mañana e inició una protesta por lo que él considera "una condena injusta".

A.G., juzgado el pasado año por un jurado popular, que lo consideró culpable de dar muerte a su primo, J. A. G., el 30 de enero de 2010 en la pedanía murciana de Patiño durante una discusión, se encuentra pendiente de que su caso lo revise el Tribunal Supremo.

La semana pasada, familiares y amigos llevaron a cabo una concentración a las puertas del Instituto Anatómico Forense de Murcia para reclamar la inocencia del condenado, pedir que se revise la autopsia de la víctima y que se repita el juicio.