Son unas pildoritas que están concebidas para mejorar la comunicación en circunstancias muy diferentes: en una entrevista de trabajo, cuando queremos defender una idea, para ligar...

¿También tienen efecto a nivel institucional?

Sí, y eso es algo que me interesa muchísimo. Se acerca la Expo y necesitamos difundir una imagen positiva.

¿Es que acaso nuestra Comunidad está enferma?

(Ríe) Aragón es una tierra rica en todos los sentidos y tiene personas maravillosas, pero la comunicación se ha descuidado bastante.

¿Y la Expo puede ser la oportunidad para ponernos al día en esta materia?

Claro, debe serlo. Durante varios meses seremos un escaparate al mundo. A Zaragoza le falta dar el salto y ese salto no cabe duda de que está en la comunicación.

Usted es gallega. ¿Qué saben en Galicia de lo que va a ocurrir aquí en 2008?

Bastante poco. Está claro que la comunicación de la Expo no ha dado todos los frutos que podría dar, pero todavía hay tiempo.

¿Qué me dice de la televisión autonómica? ¿Es una manera de darnos a conocer?

Sí, claro. Aragón Televisión nos ofrece la oportunidad de mostrar lo que queramos de nosotros mismos y de presentar a una Zaragoza moderna, cosmopolita y acogedora.

Sin embargo, mucha gente piensa que lo que se vende es el tópico del baturrismo...

Cada programa tiene su contexto y no está mal si se presenta con moderación. Todavía estamos empezando.

Adelánteme una de sus pildoritas, por favor.

Todo en la vida es comunicación, desde que nacemos hasta que morimos.

Bio

Es gallega, tiene 42 años y ha dedicado su vida a la comunicación como periodista y desde las aulas como profesora de Universidad.