El barrio con mayor delincuencia de Bilbao puede que empiece a asomar la cabeza y salir del pozo marginal en el que se ha convertido en las últimas décadas. Las instituciones han decidido que ya es hora de lavar la cara de Bilbao La Vieja con la entrada de nuevos comercios.

El último en irrumpir en el paisaje del Bilbao más olvidado ha sido el negocio de la moda, con la inauguración, el pasado 29 de marzo, de la nueva sede de Biem Producciones y la Asociación de Jóvenes Diseñadores Vascos. Con esta incorporación se espera convertir a Bilbao La Vieja en el Soho londinense, el Born barcelonés o el Chueca madrileño de la capital vizcaína.

«Creemos firmemente en la regeneración total del barrio; y no dentro de mucho tiempo», señala Isabel Muela, directora de Biem, que pretende recuperar la zona con la celebración de desfiles y eventos relacionados con el prêt à porter, que ya logró reunir en su primer fin de semana a más de 2.000 personas en el BLVD. Muestra, un festival que mezcló moda, arte, diseño y gastronomía.

Los dos locales, en los números 38 y 40 de San Francisco, contrastan con el panorama que los rodea, de la misma forma que sorprendió a los vecinos la presencia de diez coches patrulla la noche de la inauguración, cuando, según ellos, la Policía Municipal sólo recorre el barrio en busca del trapicheo.

Más negocios de arte y cultura

Lan Ekintza, la sociedad municipal de apoyo al empleo,  ha logrado dar un impulso vital a Bilbao La Vieja. En tres años ha apoyado la creación de cerca de una veintena de negocios nuevos en el barrio.   Lan Ekintza, en colaboración con Viviendas Municipales, ha facilitado a los emprendedores la compra de locales en la zona. Así, en este tiempo, se han implantado negocios relacionados con la cultura y el arte, como la revista Artez Blai, el estudio fotográfico Vicente Paredes o, incluso, la empresa Euskaltel.