Las fuerzas ucranianas han recuperado parte de la ciudad de Lugansk, zona rebelde situada al este del país, donde los combates con los separatistas prorrusos han llegado a las calles, según informó Andréi Lisenko, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania (CSND). "Los militares ucranianos han logrado arrebatar parte de Lugansk (a los separatistas). Lugansk está totalmente rodeado. Se lleva a cabo una operación de liberación", afirmó el portavoz durante su habitual comparecencia ante la prensa.

Según Lisenko, varios refugiados murieron, mientras intentaban escapar de la ciudad, tras caer bajo el fuego de artillería de los separatistas. "Ha muerto mucha gente, entre ellos mujeres y niños. El número de víctimas se está precisando", detalló el portavoz

En las últimas 24 horas han muerto en combate nueve soldados ucranianos y veinte han resultado heridos, en el este de Ucrania, zona donde la fuerza de las fuerzas de Kiev estrechan cada vez más el cerco sobre los principales bastiones de los sublevados, incluidos Lugansk y Donetsk, las dos capitales de las regiones homónimas.

Lugansk, sitiada desde hace semanas por las fuerzas gubernamentales y escenario de los más encarnizados combates entre los dos bandos, "está al borde de la supervivencia", según advierte en un comunicado la asamblea municipal de esa ciudad, en la que siguen alrededor de 250.000 de sus 430.000 habitantes. Tal y como explicaron las autoridades municipales, "la ciudad se encuentra en situación crítica desde hace 16 días. No hay suministro eléctrico ni agua, tampoco funcionan el teléfono fijo ni los móviles". Así, pues,  los ciudadanos hacen grandes colas para comprar productos y alimentos de primera necesidad en los pocos mercados y tiendas que siguen abiertos. "En general, la situación con el abastecimiento de alimentos, medicinas y combustibles no ha cambiado, no llegan a la ciudad. Tampoco se pagan sueldos ni pensiones", señala el comunicado.

En la actualidad, los combates calle por calle continúan en la parte oriental de Lugansk, donde son cada vez más los edificios de viviendas destruidos total o parcialmente.