La mayoría de los inmigrantes que esperaban a última hora ante la Subdelegación llegaban sin empleador y sin la documentación requerida para estos trámites, por lo que muchas de estas peticiones no fueron admitidas, según fuentes oficiales. Un fenómeno parecido al que se dio en Valencia y Castellón. En total, al concluir el plazo se habían presentado 43.609.

Un primer balance del delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Antoni Bernabé, aventuró que más de 100.000 trabajadores van a poder normalizar su situación legal en esta autonomía gracias a este proceso, que concluyó el sábado con «éxito» y reduce la economía sumergida, según sus palabras.

Aportarán 1.500 millones

Hasta las 22.00 h del sábado, último día de plazo, en toda España se habían presentado 691.059 solicitudes de regularización de inmigrantes (la mayoría, ecuatorianos y marroquíes), que aportarán en 2006 a la Seguridad Social 1.500 millones, dijo ayer el titular de Trabajo, Jesús Caldera. Añadió que las inspecciones de empleo ilegal se centrarán en provincias con menos peticiones sobre su cifra de inmigrantes empadronados. Según el PP, han quedado fuera de este proceso 1.000.000 de inmigrantes; el Gobierno lo rebaja a 100.000.