El Ayuntamiento de Berango dice «vale ya, chavales». Una normativa aprobada ayer multará con 300 euros al joven pillado haciendo botellón en el municipio. La decisión viene después de que cada fin de semana arribaran en el pueblo unos 300 chavales con litronas, huyendo de la ley antibotellón de Bilbao. La veda a los litros se abrió en la capital en noviembre, y desde entonces el fenómeno se diseminó por las zonas adonde llega el metro.

Además, en Berango está la discoteca Image, un polo de atracción para muchos jóvenes amigos del botellón.

La ordenanza municipal es producto de las quejas vecinales, hartos de los daños colaterales de beber bastante y en botella: ruido, suciedad, peleas...