Unos 40.000 fieles de todas las edades, animados por el buen tiempo, conmemoraron la entrada de Jesús en Jerusalén portando en sus manos las palmas confeccionadas por los artesanos ilicitanos.
La creatividad de los diseños asombró a propios y extraños un año más. El ramo artesanal se confecciona trenzado, enlazando las hojas de palma y rizándolas, empleando un método parecido a la cuerda de esparto. Su característico dorado se logra ocultado del sol las hojas de la palmera, lo que las dora. El resultado se exporta a jefes de Estado (el Papa, el Rey...) y personalidades de los cinco continentes.
Esta celebración se remonta a 1371 y el comercio de la palma está recogido en libros de 1429.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios