Un equipo municipal, en el que intervienen cinco áreas del Ayuntamiento, media ya en los problemas vecinales para encontrar puntos de encuentro y buscar una solución que ataje los conflictos de convivencia. El pleno del Ayuntamiento de Bilbao aprobó ayer, en la última sesión del mandato, la creación de este equipo, aunque, en realidad, lleva formándose en la sombra durante el último año.

Tras estos conflictos, según explicó ayer el concejal de Seguridad Ciudadana, Eduardo Maíz, se esconden diferentes problemas relacionados con las drogas, la exclusión social, el alcohol o la pobreza, entre otros, lo que genera alarma social, amenazas, miedo..., y, en definitiva, la falta de convivencia.

De ahí que, una vez detectado el conflicto, sea necesaria la participación de  psicólogos de Acción Social, técnicos de Viviendas Municipales, especialistas en Urbanismo y, en algunos casos, de los agentes de la Policía Municipal bilbaína.

Durante este año, de hecho, este equipo, que está formado por ocho personas y que cuenta también con el asesoramiento externo de agentes sociales como Gernika Gogoratuz, ha intervenido ya en cinco conflictos.

Uno de ellos, en San Francisco, está resuelto,  y ahora  trabajan en la resolución de problemas en Ollerías, Carnicería Vieja, Miribilla y Zazpi Landa. Tras resolverlo, el equipo hará un seguimiento del problema.

Seguridad para las zonas de ocio

Bilbao dispone de dos operativos especiales destinados a garantizar la seguridad en las zonas de ocio. Uno, centralizado en Deusto, y el otro, en el Casco Viejo, según explicó ayer el concejal de Seguridad Ciudadana, para rechazar una iniciativa del PP que planteaba crear una unidad específica sobre el ocio nocturno. Estas patrullas se encargan, además, de hacer cumplir las ordenanzas del botellón, los horarios y aforo de los bares, así como prevenir incidentes.