El antiguo líder de Héroes del Silencio ha elegido Zaragoza, su ciudad natal, para iniciar uno de sus experimentos musicales. El carpódromo, una carpa gigante, instalado en el parque Torre Ramona hará de escenario de un concierto en el que la música se mezclará con actividades lúdicas relacionadas con el arte electrónico.

 

Se trata del primero de los cuatro conciertos de la gira con Movistar que Bunbury realizará en este escenario móvil que lo llevará después a otras ciudades del país para presentar el amplio repertorio de temas incluidos en su último álbum, El viaje a ninguna parte.

 

El cantante ya realizó seis conciertos en el Teatro Principal en junio de 2004 para presentar el cuarto disco de su carrera en solitario.

 

Esta nueva experiencia musical, que contará con lo último en avances tecnológicos, permitirá hacerse a los asistentes una idea de lo que fue el Freak show, espectáculo con que Bunbury presentó su disco bajo la carpa de un circo.

 

Entre otras actividades, el carpódromo albergará el Bounce street, que permite sacar fotos a personas del público para convertirlas en círculos de color que se proyectarán en el telón.

 

La extravagancia acompaña una vez más a Bunbury en sus actuaciones, en las que siempre trata de incluir novedades y en las que el espectáculo visual suele ser tan importante como el musical.

 

Tras unas vacaciones en Vietnam previas al comienzo de su gira, que lo ha llevado ya a Madrid y Albacete, el cantante aragonés viajará con su directo a los EE UU, México, Perú y Nicaragua y además visitará por primera vez en su carrera Japón.

 

* Parque Torre Ramona a las 21.00 horas. Apertura de puertas a las 19.30 horas. Entradas agotadas.

 

 

 

Sus recuerdos: Enrique Bunbury dejó su huella marcada en La Estación del Silencio. Dos amigos suyos dirigen este bar-museo que muestra algunos de los objetos más preciados y reconocidos por sus fans. Discos de oro y platino o alguno de sus particulares atuendos, como el traje plateado que lució en su gira Avalancha, con Héroes del Silencio, pueden verse en este bar.

 

 

Personalmente: Todos los objetos que están expuestos son seleccionados por el propio Bunbury que los trae a la Estación cada vez que pasa por Zaragoza. También los miembros de Huracán Ambulante, el grupo de músicos que lo acompañan en sus conciertos, se encargan de recoger todo aquello digno de ser expuesto y que sirva de recuerdo de una gira o una actuación estelar. No es difícil, por este motivo, ver al mismo Enrique e incluso al batería de Héroes del Silencio, Pedro Andreu, frecuentar este establecimiento para recordar viejos tiempos.

 

 

5.000 sólo en Zaragoza: La Estación del Silencio quiere celebrar la vuelta de Enrique Bunbury a los escenarios zaragozanos y para ello abrirá excepcionalmente sus puertas hoy y mañana a partir de las 15:00 horas, ya que sus puertas estarán cerradas al término del concierto. Todos aquellos que quieran conocer el mítico local zaragozano encontrarán sorteos, premios, buena música y ambiente artístico en una parada inevitable en El viaje a ninguna parte.

 

 

 

Bunbury vive a un ritmo frenético. Mientras ‘vende’ en directo El viaje a ninguna parte, en gira hasta octubre, prepara disco nuevo, se afianza en el mercado  editorial y quiere probar suerte en el séptimo arte.

 

 

Enrique Bunbury trabaja ya en su próximo disco, Judas. Preparó sus primeras canciones durante unas vacaciones en Vietnam antes de iniciar los conciertos. De esclavitud y de cadenas, Ahora, Marlon Brando, Hijo de Cortés, Látex, Space is the place, Hay cosas que... y Solo son los títulos de sus próximas canciones.

 

Los cines Warner Lusomundo Sogecable acogerán el 25 de mayo (22.00 h.) el estreno de Freak Show: la película, el documento audiovisual que recoge la gira que Bunbury realizó el año pasado por cinco ciudades españolas. Nacho Vegas, Adriá Puntí, Iván Ferreiro, Carlos Ann y Mercedes Ferrer acompañaron al zaragozano. Tras la película, habrá una charla-coloquio con él.

 

 

La editorial de Bunbury y Antonio Estación tiene a la venta dos obras. La última de ellas, Labios perdidos no dan dirección, de Octavio Gómez, se presentó en Fnac con la actuación de Bronski y Los Cármenes.

 

 

Bunbury participó en marzo  en un homenaje al poeta Leopoldo María Panero. Interpretó poemas acompañado de una banda de músicos.