La organización agraria Apag Extremadura Asaja ha advertido de que una subida de impuestos para el vino como, según apunta, piden "algunos médicos", supondría "la muerte inmediata" del sector vitivinícola.

Asimismo, ha rechazado que el citado producto sea "el problema del elevado consumo de alcohol entre los jóvenes", y apunta que si se sube el precio del vino "sólo podrían acceder" al mismo "las elites privilegiadas, los grandes asalariados", algo que según apunta "no" lo va a "permitir" porque "el vino no se puede convertir en un producto de lujo sólo al alcance de unos pocos".

De este modo sale al paso la organización agraria —en nota de prensa— de manifestaciones realizadas, según apunta, por "un colectivo de médicos que intenta despreciar así las virtudes de un producto que de forma moderada está científicamente probado que beneficia a la salud de la persona".

De hecho, incide en que "muchos médicos confirman que es una bebida sana y óptima para el organismo", como —añade— "se ha demostrado de forma tradicional y durante siglos en el país".

En este sentido, rechaza que el vino, como según indica plantean "esos determinados médicos", se asemeje a otro tipo de bebidas alcohólicas "dañinas", e incide en que "por supuesto ni de lejos es el problema del elevado consumo de alcohol entre los jóvenes".

Sobre este respecto, ha recordado que la producción de vino ha "disminuido" en los últimos años "de forma significativa" en el país mientras que el consumo de alcohol "en general se ha multiplicado".

IMPUESTOS

De igual manera, recala que una subida de los impuestos al vino "no sólo no generaría la solución al problema del consumo del alcohol en la sociedad", sino que "sería el golpe mortal y definitivo para el sector vitivinícola", lo que además "conllevaría de forma directa miles de puestos de trabajo que se perderían por ser un sector que demanda una gran mano de obra, tanto de forma directa como indirecta".

"Y si el porcentaje de paro se eleva en España todavía más, no sabemos cómo y de dónde van a seguir cobrando esos médicos los grandes salarios que reciben, muy alejados y sin comparación con las modestas retribuciones del mundo agrario, que en muchos casos no sirven ni para salvar la producción como para que encima ahora se le intente añadir por desconocidos otro problema añadido que se convertiría en mortal, como hemos explicado", añade Apag Extremadura Asaja.

En la misma línea, insiste en que el vino ha sido en España "de manera histórica un producto apegado a su cultura, a su gente, a su producción, que ha presumido de su elaboración durante siglos, que ha formado parte de muchas generaciones, que ha mantenido a flote muchas empresas y trabajadores".

Finalmente, apunta que por ello "no" entiende que "un grupito de médicos desprecien ahora las bondades de un producto que ellos mismos recomiendan en sus consultas a todo tipo de pacientes, a los que invitan por el bien del sistema cardiovascular que se acompañe en las comidas de una copa de vino para mejorar así la salud".