Este lunes, y solo un día después de su estreno en Estados Unidos, la serie The Leftovers (La Ascensión) aterriza en Canal+ (22.30 horas) con una complicada misión: ocupar el hueco dejado por Juego de Tronos.

Antes de su estreno, la serie ya ha creado cierta expectación en su país de origen. El proyecto no solo viene avalado por el prestigio de la cadena HBO, sino que significa el regreso a la televisión después de cuatro años de alejamiento de esta de Damon Lindelof, creador de Perdidos.

El escenario que Lindelof dibuja en The Leftovers junto con el novelista Tom Perrotta, autor de la novela que inspira la producción, navega por un drama de pérdida y espiritualidad, unos acontecimientos siniestros y un análisis de cómo la gente corriente reacciona ante situaciones inexplicables.

La historia comienza tres años después de que un 2% de la población —entre ellos bebés, adultos y ancianos— desaparezcan como por arte de magia. Kevin Garvey (Justin Theroux), padre de dos hijas y jefe de policía de un suburbio de Nueva York, asume la responsabilidad de aportar cordura a una sociedad que no ha vuelto  a ser la misma desde entonces.

Además de Theroux, forman parte del reparto otras caras conocidas como Amy Brenneman (Conociendo a Jane Austen), Liv Tyler (El Señor de los Anillos) , Christopher Eccleston (Héroes) o los hermanos Charlie y Max Carver (los hijos de Lynette en la serie Mujeres desesperadas).

Pese a todos los elementos que avalan la serie, las críticas que esta ha recibido hasta ahora han sido solo tibias. The Washington Post  valora que la serie plantee un paisaje "sumamente intrigante", aunque acusa un "estilo monótono" y la ausencia de ironía. Por su parte, la revista Variety habla de un arranque que "hace pensar" y un argumento "desasosegante", pero que luego realza sus ingredientes de una forma irregular.

Más entusiasta es The New York Times que considera que la ficción tiene "un pricipio prometedor". Eso sí,  también advierte de que la forma narrativa, más lenta que las de algunos de sus competidores, "necesita un tiempo" que no sabe si le concederá la audiencia.