El profesor Karlheinz Brandenburg, considerado el 'padre' del mp3, ha asegurado que no se siente responsable de la piratería y ha aseverado que en la actualidad "la gente sigue amando y comprando música" pero de "diferente manera".

El investigador alemán ha realizado estas declaraciones en una rueda de prensa ofrecida en la Universitat Politècnica de València (UPV), que este martes le va a investir como nuevo doctor honoris causa. En el acto ha estado acompañado por el rector de la institución académica, Francisco Mora, y el director de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Telecomunicación, Alberto González.

Brandenburg fue el desarrollador principal del algoritmo de compresión que cambió la forma de consumir música, ya que el formato mp3 permite que cualquier persona pueda llevar en su bolsillo discografías enteras, que la música pueda ser transmitida por internet de forma fácil y rápida, y que se pueda disfrutar desde cualquier teléfono móvil.

Preguntado por si cuando emprendió en este proyecto se imaginó alcanzar una repercusión así, ha reconocido que "un investigador siempre sueña con conseguir un gran éxito" pero ha comentado que los efectos, en multitud de ocasiones, son imprevisibles. De hecho, ha comentado que él y su equipo pensaban más en aplicaciones para escuchar televisión o radio, pero que nunca pudieron anticipar un fenómeno como el de los podcast.

Tampoco adivinaron a cuánta gente llegaría: "Nuestros cálculos iniciales eran de un millón de personas y erramos por un factor de mil, ya que ha llegado a miles de millones", ha relatado con una sonrisa.

Cuando se le ha planteado si se siente, en parte, responsable por la piratería y su opinión sobre las críticas de la industria musical tradicional, el ingeniero ha contestado rotundo que no y ha argumentado que para el sector de la música "los cambios no son nada nuevo" y ha puesto el ejemplo de la radio.

En este punto, ha opinado que la industria debe adaptarse a las transformaciones, que son "imparables" y ha afirmado que "la gente hoy en día continúa amando y comprando música pero de otras maneras".

En la misma línea, ha defendido la necesidad de pagar tanto por el trabajo de los músicos como por el de todos aquellos que realizan esfuerzos en ese sector y ha apuntado que "las elecciones tecnológicas" no siempre son iguales que la de los "negocios".

Al respecto, ha hecho notar que se produjo un desfase de unos cinco años entre la aparición del avance tecnológico inmediato y el surgimiento de las webs de descarga legal de música.

Sobre los efectos de la crisis económica en la ciencia, el ingeniero ha comentado que "recortar en investigación siempre es malo" porque el avance científico es "el pan de mañana". "No quiero decirle al Gobierno español lo que tiene que hacer pero recortar es siempre una mala idea", ha aseverado.

Por contra, ha aludido al ejemplo de Alemania: "Cuando tuvimos nuestra crisis y las compañías empezaron a reducir su aportación, el Gobierno hizo lo contrario y aumentó los presupuestos para investigación".

Finalmente, y sobre su opinión sobre cuál será la próxima revolución en el campo de las comunicaciones, ha dicho que imposible de prever pero ha mostrado su predilección por el campo de la inmersión, que aúna "audio y vídeo para transportarte a otro entorno".

Incorporación de la tecnología a la sociedad

Por su parte, el director de la Escuela de Ingenieros de Telecomunicación —que ha recordado que la investidura se realiza en el marco de la conmemoración del 25 aniversario de la entidad educativa— ha subrayado que Brandenburg supone para los estudiantes "una referencia de la investigación y de su incorporación decidida al mercado y a la sociedad".

A lo largo de su trayectoria profesional, el profesor Brandenburg ha recibido numerosos premios, y ha realizado una intensa labor investigadora y de transferencia tecnológica, que le ha valido, entre otros reconocimientos, figurar en la lista de los inventores alemanes más relevantes y ganar la Cruz de Mérito de la República Federal Alemana.

En la actualidad, Brandenburg es catedrático de la Universidad Técnica de Ilmenau y director del Instituto de Medios Digitales (IDMT) del Instituto Fraunhofer. Además, es miembro de la AES (Audio Engineering Society), del IEEE (Institute of Electrical and Electronic Engineers), y del MPEG (Motion Pictures Experts Group), la entidad que se encarga de definir los estándares de audio y vídeo a nivel mundial. Tiene registradas 27 patentes como coautor, solo en Estados Unidos.