El portavoz del Partido Aragonés (PAR) en la Comisión de Hacienda de las Cortes de Aragón, Antonio Ruspira, se ha mostrado partidario de abordar una reforma fiscal, "porque las bajadas de impuestos se traducen en más dinero disponible para familias y empresas, y ello ha de traducirse en mayor consumo, reactivación económica y creación de empleo".

No obstante, Ruspira ha advertido, en una nota de prensa, que "la reforma es mejorable" y ha abogado por "mayores guiños hacia la PYMES, que suponen el 95 por ciento de las empresas, así como a los autónomos, mediante un sistema de retenciones que dependa de los ingresos".

A juicio del diputado del PAR, la reforma "tiene que beneficiar sobre todo a las personas con menos ingresos, tal como venimos defendiendo" y ha recordado que "en Aragón no ha subido la presión fiscal en los impuestos que dependen de la Comunidad".

Antonio Ruspira ha subrayado que "la reforma de la financiación autonómica será la piedra filosofal". "Aragón no puede recibir menos transferencias del Gobierno central, porque las comunidades tienen competencias plenas en asuntos tan trascendentales como la educación y la sanidad, y no se pueden pedir más sacrificios", al tiempo que ha defendido la bilateralidad y ha recordado el Estatuto de Autonomía, en su artículo 107, prevé mecanismos de compensación si el Gobierno central recorta fuentes de ingresos a Aragón.