El Aeropuerto de Lanzarote ha puesto este miércoles en servicio la nueva configuración de los controles de seguridad, que están situados en la zona izquierda de la planta de salidas del Edificio Terminal, cambiando la ubicación de los ya existentes en la zona central.

Aena explicó en una nota de prensa que para ello, se ha construido un filtro integrado en el hall de salidas de la T1, ocupando una superficie de 1.200 metros cuadrados y con capacidad de crecimiento para ampliar el control si fuese necesario.

La nueva configuración del área de seguridad dispone de seis máquinas de rayos X para la inspección del equipaje de mano —con posibilidad de ampliación futura de dos máquinas más—, cuatro arcos detectores de metales, una máquina de equipajes especiales, dos de inspección de líquidos y dos de detectores de metales en calzado.

Por su parte, la zona de acceso al control de seguridad cuenta con una gran amplitud fuera del flujo de las colas de facturación.

Además, tiene dos puestos SCAFIS —lectores de tarjetas de embarque—, amplias camas de rodillos antes de las máquinas de rayos X para facilitar el transporte de las bandejas y una zona de confort para acomodar las pertenencias una vez realizado el control.

Asimismo, los nuevos filtros permiten a los pasajeros acceder a la zona de embarque a través de la tienda duty-free, situada inmediatamente detrás de los mismos.